¿Cuántas veces hemos deseado tener quince días de tranquilidad para hacer todas esas cosas que no podemos por la rutina, porque vamos como locos por la vida, sin tiempo para nada? Pues ha llegado nuestro momento, y a pesar de la incertidumbre, hay que vivirlo con ilusión, no queda otra…
Empezaba muy bien el año 2020, con muchos proyectos, y especialmente en golf femenino: nuevas alianzas, torneos confirmados, otros por anunciar, una Solheim a punto de oficializarse definitivamente… todo era más que positivo. Y, de repente, se para todo, y lo vivimos como en una película, yo diría una mezcla entre ciencia ficción y El día de la Marmota.
Todos encerrados en casa, en shock, sin saber qué hacer y pensando en las terribles consecuencias que esto va a tener. Pues no, señores, esa no es la actitud. Ahora más que nunca hay que mantener la ilusión y coger carrerilla para lo que viene después, porque, por suerte, sabemos que esto tiene un final.
Si miramos los circuitos femeninos, el más perjudicado es el LPGA evidentemente, que ha tenido que suspender todos los torneos hasta el mes de abril, y alguno más vendrá hasta que se recupere la normalidad, y luego será complicado encontrar el hueco para recuperarlos; sin embargo, el LET sólo ha aplazado uno, el de Arabia Saudí
Por suerte o por desgracia es un circuito que se está recuperando y que tenía muchas fechas libres en su calendario, por lo que reubicar este torneo, así como algún otro que se pueda ver perjudicado, no tendrá mayor problema. Lo mismo ocurre con el LET Access, y el Santander Tour, así que nuestras golfistas podrán volver a la normalidad en breve.
Pero la mejor noticia es que, de momento, que sepamos, no hay casos de coronavirus entre los golfistas profesionales, al menos no se han anunciado o confirmado, cosa que no ha pasado en el resto de los deportes. Eso demuestra una vez más las maravillas del golf y el deporte al aire libre.
Hay que reconocer que vivimos en un país de cachondos, y prueba de ello son los chistes y vídeos que circulan cada vez que ocurre algo en este país, me impresiona la inmediatez de la “cachondada”.
Pero ahora que todos tenemos más tiempo, no sólo tenemos los watsap inundados con este tipo de cosas, buenas y malas, sino que además tenemos tiempo para leerlas, que en el día a día no lo hacemos. Sin embargo me preocupa que la gente se está desquiciando y se descarga en las redes; yo ya tengo tres grupos que han acabado a bofetadas virtuales. ¡Calma!!!!!
Es el momento de llamar a la calma, a la ilusión, a la originalidad, a la genialidad como ese reto que tienen los golfistas de grabarse dando toques a los rollos de papel higiénico, de hacer orden no sólo de armarios, sino de nuestra vida y pensar con ilusión qué será lo primero que haga cuando se recupere la normalidad. La ilusión es algo que nos mantiene fuertes, como hemos visto en Make-A-Wish, así que debemos trabajarla y pensar en el futuro.
Porque ya queda un día menos para que esto pase, y aunque luego habrá complicaciones económicas, por primera vez en el mundo todos los países tendrán que remar en el mismo sentido, ayudarse unos a otros, y en beneficio de todos, como han hecho este año el LPGA, LET, ET y R&A, un ejemplo de unión y colaboración por el futuro del golf femenino a nivel mundial.
Así que… a coger carrerilla porque esto va a acabar y tendremos que salir a las calles con más fuerza, ilusión y entusiasmo que nunca. Mi reto para cuando se recupere la normalidad es volver a jugar al golf. ¿Cuál es el tuyo?