El desplazamiento a los grandes estadios donde se celebran los eventos deportivos suele generar grandes complicaciones de movilidad debido a su ubicación (periferia o barrios de grandes ciudades) y al gran número personas que acuden a dicha cita deportiva a pie, en vehículo privado, taxi, transporte público u otros medios, lo que hace que sean más complejos y largos de lo normal.
La afluencia masiva a los estadios causa atascos, satura el transporte público y produce cortes y desvíos de tráfico. Además de estos problemas causados por la gran movilidad de personas en una franja horaria concreta, hay que señalar y añadir algunas conductas inseguras provocadas por el agobio, las prisas o el ambiente festivo, que inducen en ocasiones a consumir alcohol y/o estupefacientes, afectando sin lugar a dudas a la fluidez y a la seguridad de la circulación en las vías aledañas a los estadios.
Otro de los aspectos que se ha detectado en el informe tras realizar diferentes encuestas a los colectivos, es la falta de organización, en cuanto a movilidad, en los eventos deportivos: más del 70% de los aficionados considera que, aunque se extremen las medidas policiales, los desplazamientos a este tipo de celebraciones siguen estando mal organizados. Aunque aficionados, policías y entrenadores coinciden al señalar que estos desplazamientos no son de riesgo para sufrir un accidente de tráfico, aficionados y entrenadores valoran de forma positiva que las fuerzas de seguridad velen por una mayor seguridad.
Y la situación de mayor riesgo de atropello o accidente de tráfico se produce según los aficionados minutos después de la celebración del evento y en los alrededores del estadio. El atropello de peatones por vehículos es el principal riesgo detectado por los tres colectivos que han participado en el estudio, y no respetar el paso de peatones la principal infracción que se comete, siendo el peatón el usuario más vulnerable en este tipo de desplazamientos.
A pesar de que los eventos deportivos generan tráfico y una gran movilidad de personas, hay que aprovechar esa vinculación existente entre tráfico y deporte, para concienciar e informar a la población para que circule de forma segura. Este aspecto también ha quedado reflejado en el estudio, ya que todos los entrenadores entrevistados consideran que el respeto es el principal valor deportivo que se debería aplicar a la seguridad vial. Por otra parte, los aficionados también consideran apropiado el entorno de los campos de fútbol para promover campañas de seguridad vial o de consumo de alcohol y conducción.
Tras el análisis de la movilidad y los desplazamientos en estos eventos, el estudio recoge una serie de recomendaciones, con el objeto de mejorar la seguridad vial y los accesos en estas situaciones. Las recomendaciones sugeridas son: incrementar la oferta de transporte público; aumentar los recursos de agentes que coordinen y controlen los desplazamientos seguros; aprovechar la coyuntura para promover campañas de sensibilización en seguridad vial, relacionadas con valores del fútbol y del deporte en general; e informar y sensibilizar a los distintos usuarios para que estos desplazamientos se realicen de forma segura, respetando los espacios habilitados para los distintos usuarios y realizando un mantenimiento periódico del vehículo y de los neumáticos, ya que el 33% de los aficionados que se desplazan en coche al campo de fútbol no están aún concienciados de que un buen mantenimiento de las ruedas puede reducir el efecto de la accidentalidad, ya que revisan los neumáticos cada más de tres meses.