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Serán la novena pareja de padres e hijos en el primer Major del año

Craig y Kevin Stadler, juntos en Augusta.
Craig y Kevin Stadler, juntos en Augusta.

Los Stadler, por fin juntos en Augusta

lunes 03 de febrero de 2014, 16:25h
Tras el último putt fallado por Bubba Watson en el green 18 del Waste Management Phoenix Open la puerta de la victoria se abría para Kevin Stadler. Pero además de la puerta del triunfo también se abrió otra cancela, está más personal, la que a partir de este jueves juntará en el Augusta National a padre e hijo en una cita sin solución de continuidad por primera y última vez.

Su padre, Craig Stadler -que ganó el Masters en 1982- estaba viendo con inusitado interés la última jornada del Phoenix Open y con enfermiza tensión los últimos hoyos del torneo 239 de la carrera de su hijo Kevin en la PGA. Hasta ese momento Kevin no había ganado nunca pero la historia cambió para su vástago el domingo y también para él, aunque de manera indirecta.

Con esa primera victoria del orondo Kevin, el Masters de Augusta era ya un regalo extra que venía dentro del paquete del triunfo. Un Masters en el que debutará y en el que estará -ayer intentaron entrenar juntos y dieron sus primeros paseos por el campo de Bobby Jones a pesar de la suspensión- con un habitual del torneo, su padre Craig que, además, jugará en su última cita con la Chaqueta Verde ya que hace algunos años dijo que cuando su hijo jugara por primera vez en Augusta el disputaría su último torneo en casa de Bobby Jones.

Y si es hombre de palabra, que lo es, Craig jugará su última edición con su hijo, algo que ha pasado sólo ocho veces en la historia del torneo -la última en 2010- cuando jugaron Bill Haas y Jay Haas, su hijo, en 2010. Craig, que ha ganado 13 veces en la PGA y nueve en el Tour Champions, vio con alegría la primera victoria de su hijo que, seguro, disfrutará con su padre de por lo menos un par de rondas de entrenamiento en un campo que Craig conoce de maravilla.

El año pasado el mayor de los Stadler no pasó el corte en Augusta firmando dos vueltas de 79 golpes que le dejaron con 158 impactos fuera de un fin de semana que, seguramente, tampoco juagrá este año aunque si cabe la posibilidad de que Kevin pueda jugar las dos primeras vueltas con su padre que disputará entonces su últimos recorridos en el torneo de Maestros.

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