Tiger acelera pero todavía le falta agarre en las curvas

De nuevo, le toca la heroica al ex número uno del mundo si quiere ganar el Cadillac Championship. Otra vez necesta una vuelta milagrosa para intentar luchar por la victoria y que la mayoría de sus rivales más cercanos no tengan su día.

Demasiadas coincidencias para luchar por un título que parece que le queda algo lejana y por la que tiene complicado competir después de una mala primera vuelta. Los 72 golpes del primer día le lastraron en una primera jornada en la que de nuevo un golf irregular, sin chispa y a veces sin demasiado compromiso, hizo que terminara en una discreta parte de la tabla.

Pero la estrategia de Woods es clara. Después de esa mala primera vuelta sólo le queda mejorar y seguro que el domingo saldrá a por todas, de nuevo en plan kamikaze y a intentar un milagro que sigue sin llegar. Él sabe el primero que así es muy dificil ganar un torneo, aunque también está claro que cada vez parece más cerca de un estado óptimo de juego.

Antes o después llegará la semana en la que Tiger juegue bien los cuatro días, patee bien, le pegue recto a la calle, approche con la calidad que se le presupone y no cometa errores. Si, además, tiene confianza en si mismo y sus rodillas se lo permiten, esa semana ganará, sin duda. Pero para que eso pase se tiene que dar muchas posibilidades que, de momento, todavía no se han conjuntado.

Veremos si mañana es día de milagro o de tranquilidad, aunque la combinación de nervios de sus rivales y su afán por la victoria puede producir un cóctel explosivo. Ya veremos lo que sucede. Yo, por si acaso, no me lo perdería.