"Ha sido un día duro", comentaban Tania Elósegui y Emma Cabrera. "No han salido las cosas y no es lo que esperábamos". Para las españolas el problema ha sido que "no hemos cogido calles y eso luego se complica". Una vuelta de 73 golpes, con cuatro bogeys en la segunda vuelta, las deja a cinco de las suecas, que siguen líderes pero con las danesas y las australianas pisándoles los talones.
Todo iba sobre ruedas. Partido estelar con las suecas Anna Nordqvist y Sophie Gustafson y con el objetivo de recortar dos golpes. La primera vuelta fue un mano a mano donde las españolas aguantaron el ritmo de las suecas. Dos birdies de cada equipo más un bogey en el hoyo 7 de las nórdicas.
Precisamente ha sido en el hoyo 7, el par 4 que más complicaciones está teniendo en esta competición, donde Gustafson se fue al agua y Nordqvist al búnker, lo que propició el error. Sin embargo, en el 9 recuperaron con un birdie gracias a un magnífico segundo golpe de Gustafson, que pateó para eagle y al final firmó el birdie. Mientras, Tania y Emma, con birdie en el 3 y en el 6 seguían concentradas.
Fue justo en el 9 cuando Emma falló pateando para birdie, lo que volvía a dar ventaja a las suecas por un golpe. A partir de ahí, la segunda vuelta fue otra historia. Con bogeys en los hoyos 11, 13, 15 y 17, el equipo español fue de más a menos, cayendo en un agujero negro que desinfló la burbuja inicial. Aún así, al finalizar con birdie en el 18, ambas jugadoras aseguraron que "la moral sigue alta. Se puede remontar y podemos hacer una buena vuelta". Para Tania y Emma, "no hemos tenido suerte y se trata de voler a la estrategia", la famosa estrategia de La Sella, que consiste en que Tania la deje cerca y Emma meta el putt.
Mañana, de nuevo con la Valencia Cup, la modalidad en la que se alternan bolas angtes de green y luego se elije la mejor para patear, las españolas esperan recuperar el tono, volver a hinchar la burbuja que les ha mantenido a flote durante toda la Copa de Europa.