Mención especial para la australiana Karen Lunn, quien llegó recientemente a La Sella tras emplear en el desplazamiento… ¡90 horas! Cambios de billetes de avión, de escalas, paso por Abu Dabi y Madrid antes de llegar al campo de golf alicantino.
La finlandesa Jenni Kuosa, por su parte, se puso en marcha la pasada semana en coche, ante la imposibilidad de volar. Ha tardado dos días y medio de viaje por carretera antes de alcanzar La Sella. “No había más remedio pero merece la pena. No me perdería por nada del mundo este torneo”, declaró a su llegada.
El barco hasta el norte de Francia ha sido el método de transporte empleado por las irlandesas para llegar a Europa Continental antes de proseguir el viaje en coche, mientras que la rusa Maria Verchenova cogió un tren entre Rusia y Alemania para tratar volar desde allí hasta España. Curiosamente, los primeros equipos que en llegar a La Sella han sido Estados Unidos y Australia, quienes emplearon rutas no afectadas por el cierre del espacio aéreo.
Una de las australianas, Karrie Webb –un auténtico mito dentro del golf femenino– aprovechó la ocasión para quedarse el domingo en Madrid, ir al estadio Santiago Bernabéu y ve jugar al Real Madrid, una de sus pasiones fuera de los greenes…
Los periodistas extranjeros tampoco han sido ajenos a las dificultades creadas por la erupción volcánica y el esparcimiento de cenizas en el aire. Uno de ellos, británico, uno de los doce de nacionalidad extranjera que se han acreditado para cubrir el torneo, empleará el tren, el autobús, el barco y el coche antes de llegar a La Sella el miércoles tras varios días de viaje.
Quien no podrá estar será la alemana Sandra Gal, que se encontraba en California en los pasados días y no ha encontrado billetes de avión (sus vuelos, como tantos otros, han sido cancelados). La sustituirá su compatriota Anja Monke, por lo que el equipo germano estará finalmente compuesto por Bettina Hauert y la citada Anja Monke.
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