Después de una primera ronda para olvidar con +1 y el palizón de la semana pasada en Augusta con 29 hoyos el domingo incluidos, Jon Rahm, ya más descansado, arrancaba esta segunda ronda del RBC Heritage con la obligación, como número 1 del mundo y ganador de la Chaqueta Verde, de intentar firmar una gran vuelta para eliminar cualquier riesgo de fallar el corte en el siguiente torneo tras su victoria en la casa de Bobby Jones.
Y bien que lo hizo el líder de la FedEx Cup que este año ya lleva cuatro victorias en su haber. Rahm entregó una espléndida tarjeta de siete bajo par que le dejaba tras el turno de mañana con un buen -6, es cierto que a seis golpes del líder en ese momento, Jimmy Walker, pero con un fin de semana por delante y con capacidad e ilusión para poder soñar con sumar una nueva victoria en un año que para el está siendo de locos.
Rahm acabó sus nueve primeros hoyos con cuatro birdies consecutivos en el 11, 12, 13 y 14 para llegar al ecuador de su vueltas tras haber comenzado por el 10 con tres bajo par en el total y enganchado de nuevo en el buen juego.
En sus nueve segundos Rahm firmaba tres birdies más en el 2, 5 y 6 para terminar con esos -7 que le dan aire para el fin de semana, que le confirman un nuevo corte fallado y que le colocan en la parrila de los posibles candidatos a la victoria este domingo.
Con su vuelta terminada acababan también en los primeros puestos de la clasificación el mencionado Walker con -12, Scottie Scheffler -que busca recuperar esta semana el número 1- y Justin Rose con -9 y empatados con -8 Mark Hubbard, Tommy Fleetwood y Patrick Cantlay, que hizo hoyo en 1 en el hoyo 7.