Esta edición del Farmers Insurance Open se ha visto marcada desde el primer momento por la presencia y la vuelta a la más alta competición de Tiger Woods.
El ex número uno mundial ha sido el foco de atención del golf mundial en su retorno al golf de máxima categoría y ese retorno tenía, claramente, un principal objetivo: pasar el corte y jugar el fin de semana en este campo que a lo largo de su carrera le ha dado siete títulos en el PGA y un Major.
Y si ayer Tiger terminaba con 72 golpes, hoy mejoraba en un impacto sus guarismos y finalizaba con 71, uno bajo par, para cumplir ese primer objetivo de pasar el corte y estar el sábado y el domingo en Torrey Pines.
En su vuelta de hoy, Tiger, que ha empezado por el 10, ha firmado ocho pares y un doble bogey en el 13 que le ha complicado el resultado y sus opciones de mejorar puestos en la tabla.
En la segunda parte de su recorrido, del 1 al 9, Woods mejoraba considerablemente sus números terminando con cuatro birdies -el último definitivo para alcanzar el -1 y pasar el corte- y un solo bogey que han hecho que Woods saliera del campo con una sonrisa en la boca y con la satisfacción de saber que ese primer capitulo de su nueva vida deportiva lo había cubierto con éxito.
El fin de semana intentará seguir mejorando pero, de momento, la primera prueba la ha superado con creces.