Hablando de pasado, en boca de Nacho Garrido, uno de los componentes del equipo europeo que ganó la edición de la Ryder Cup 1997 en Valderrama, en referencia a aquel acontecimiento inolvidable, “sigue presente el impacto de Severiano Ballesteros, es una persona que causaba sensación, que dejaba una huella imborrable, especialmente dentro del campo de golf”

Hablando de presente, a punto de comenzar la edición 2025 de la Ryder Cup en Nueva York, “Europa lleva un equipo sólido, que ya sabe lo que es ganar. Son golfistas que van a saber reaccionar, aunque es mucha ventaja el hecho de tener el público a tu favor y, ojo, de preparar el campo a tu antojo”, ha aseverado asimismo Nacho Garrido.
Y hablando de futuro, con 2031 en el punto de mira, “Camiral es una designación merecida tras dos intentos fallidos. El desarrollo del golf en Cataluña y en España va a ser brutal porque el legado pre Ryder y post Ryder va a ser muy importante”, declaró Juan Guerrero-Burgos, Presidente de la Real Federación Española de Golf.

¡Todos con la Ryder Cup! constituye desde ya mismo el lema que expresa el sentimiento de apoyo unánime del conjunto del español, dispuesto a realizar -como se manifestó durante la presentación oficial en Camiral Golf- la mejor Ryder Cup de la historia a imagen y semejanza de lo que ocurrió en Valderrama 1997, todo ello en los mismos prolegómenos de la edición 2025 en Nueva York.
La designación del célebre complejo golfístico gerundense ha puesto de nuevo de manifiesto el reconocimiento internacional de nuestro país a la hora de albergar los acontecimientos deportivos del máximo nivel.
Sede durante años de torneos de enorme prestigio, Camiral seguirá los pasos de Bethpage Black en New York (2025), Adare Manor en Irlanda (2027) y Hazeltine National en Minnesota (2029) como míticos emplazamientos de la competición por equipos más importante del mundo del golf antes de que la Ryder Cup aterrice en Girona.
Será la segunda vez que España albergue la Ryder Cup, en concreto 34 años después de que el legendario Seve Ballesteros capitaneara al equipo europeo que se impuso en Valderrama en 1997, reconociendo la trascendental aportación del golf español a la historia de la Ryder Cup, ya que once golfistas de nuestro país han representado al equipo europeo a lo largo de la historia, la segunda cifra más alta del continente solo por detrás de Inglaterra.
Severiano Ballesteros, José María Olazábal, Sergio García, José María Cañizares, Miguel Ángel Jiménez, Jon Rahm, Manuel Piñero, José Rivero, Antonio Garrido y Nacho Garrido (y Miguel Ángel Martín, lesionado en la previa de Valderrama 1997) conforman ese listado exclusivo tan importante.

Lo reconoce Juan Guerrero-Burgos, Presidente de la RFEG: “España es el primer país continental con dos Ryders, y eso es un éxito que no se hubiese producido sin el apoyo de las instituciones, jugadores y, sobre todo, sin Seve”.
La simple mención al genio de Pedreña sirvió para introducir en la conversación al gran protagonista de la jornada, Nacho Garrido, que en su primera alocución diseccionó su papel en la mítica edición de 1997. “Aquella fue la Ryder de Seve. Por eso pienso que la de 2031 va a ser la primera Ryder de España”, apuntó. “No hubiésemos ganado la Ryder de 1997 sin Seve, ni yo hubiese rendido así sin él. En esos partidos que llegaban al 18 o que se interrumpieron por la lluvia, con mucha tensión, Seve tenía un peso brutal. Te transmitía confianza, te decía ‘’mírate, claro que puedes ganar a Phil Mickelson”, y te lo creías”, señaló a modo de anécdota.
Esa Ryder, la de 1997, ha centrado buena parte de la distendida conversación con la prensa y con los deportistas que se han acercado a esta entrega de la Copa Comunicación, desde Jordi Villacampa hasta Bernd Schuster o Miguel Ángel Ferrer ‘Mista’. Y ahí el que más tenía que decir era Nacho Garrido, que desveló cómo vivió desde dentro el evento.
“Lo que más me impresionó de esa semana fue el que en un deporte tan individual y egoísta -en el que todos somos un poco enemigos en el día a día- se diese un ambiente de tanto compañerismo. El segundo día, Darren Clarke es como si fuese mi hermano. Veo a Jesper Parnevik, un tío sueco y frío, después de mucho tiempo y me saluda como si fuese también familiar suyo. Es una experiencia que te marca para siempre”, ha explicado.
Nacho Garrido es uno de los únicos once españoles que han jugado una Ryder Cup, y eso le ha dado pie a vivir situaciones únicas, como aquel mítico partido en compañía de José María Olazábal . “Es algo que vives una vez en la vida. Como una final de Champions en la que remontas un 3-0 en contra. Jugábamos contra Mickelson y Tom Lehman, y gracias al público, que nos llevó en volandas, vimos que podíamos ganar. En esas situaciones, el público es el jugador número 13”, ha contado.
Otra de las conclusiones del encuentro ha sido que aquella memorable Ryder Cup de 1997 sirvió para popularizar el golf en nuestro país. “Recuerdo que unos meses después, en un avión, la gente me conoció y se puso a aplaudirme. Nunca antes me había pasado”, recuerda el madrileño, jugador con victorias en los circuitos Europeo y Challenge.
La otra conclusión del día la ha brindado Juan Guerrero-Burgos y ha sido secundado por el foro: “la de 2031 va a ser la mejor Ryder Cup de la historia. Pero no solo por el apoyo y el trabajo de todas las instituciones, sino porque estoy convencido de que todos y cada uno de los federados españoles se van a convertir en embajadores de la Ryder Cup 2031, nuestra Ryder”.