Justin Rose se tomó muy enserio que el Masters es un evento de tradiciones, su liderato con 65 golpes (-7) le convierten en el jugador que más veces ha liderado el torneo tras los primeros 18 hoyos (cinco en total). El inglés estuvo inconmensurable y saca tres golpes al canadiense Corey Conners, al numero uno del mundo Scottie Scheffler y al sueco Ludvig Åberg, todos terminaron con 68 golpes, cuatro bajo el par.
No fue el mejor día del golf español. Fue Sergio García el mejor de la armada con una ronda de par del campo, pudo terminar perfectamente el de Castellón cerca de la cabeza, pero el putt le abandonó hoy en los greenes de Augusta National. El ganador del Masters de 2017 comenzó con birdie en el hoyo 1, falló en el dos y tres dos oportunidades de menos de tres metros, una más, mucha más clara en el hoyo 17. "Mañana intentaremos jugar bien como hoy y meter algún putt más… mi idea es intentar hacer algunos bajo el par y ponerme en buena situación”.
Josele Ballester acaparó titulares, pero no por su juego, el ganador del Us Amateur comentó tras terminar su día con +4, 76 golpes, con naturalidad el alivio fisiológico a mitad de recorrido. "Me olvidé que había un baño en el tee de salida del 13 y no sabía dónde estaba el siguiente, entonces digo me meto aquí para hacer pis que no me van a ver mucho y cuando he salido, me han empezado a aplaudir”. El alivio del español en el hoyo 13 del sagrado Augusta National ha acaparado muchos titulares de medios americanos. Independientemente de la anécdota, Josele salió nervioso y desajustado en los siempre complicados greenes, pero desde el hoyo 6 exhibió una envidiable solidez de tee a green, lastima que el putter tampoco haya sido su aliado, pero la ronda de hoy al lado del numero uno Scotty Scheffler es una clase magistral. Josele no se ve tan lejos. "Yo creo que no tengo mucho que envidiarle a Scottie Scheffler, no he estado nada acertado en los greens y ahí es donde ha estado la diferencia, de tee a green no me he visto muy lejos”, comentaba Josele tras su ronda. “No falla, es muy impresionante de ver”, concluía en referencia al jugador que domina el golf.
La decepción del día fue para Jon Rahm, sus 75 golpes casi le dejaron sin palabras y es que nada funcionó hoy en el juego del de Barrika. “Nada bueno. Todo, ha habido fallos en todo, si no la pones en calle, es imposible hacer pocas, demasiados hoyos donde he tenido que rezar para hacer pocas, todo empieza desde el tee”, contestaba lacónico. “Ha habido swings muy buenos, cuando se está trabajando en algo en torneos grandes como este es complicado”, ante la pregunta sobre el trabajo que está desarrollando, tampoco concretó el español demasiado. “Es difícil de explicar, son compensaciones que llevo haciendo año y medio y que siguen saliendo en momentos que hacen falta”.
Finalmente, José María Olazábal cerró el decepcionante concurso de los nuestros con 77 golpes +5 y con serias complicaciones para pasar el corte del torneo. "Las he luchado, el hoyo 10 me ha matado, he pegado dos golpes muy malos y he hecho triple bogey, los hierros es lo que más he fallado”, comentaba el ganador de dos chaquetas verdes, que disputa su major número 96 esta semana, aunque se enteraba del dato por la prensa: “Ahora que has dicho eso, cuatro más y nos cortamos la coleta”, sentenciaba entre risas.
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