Tras la exhibición de esta mañana en Foursomes por parte del equipo europeo, estaba claro que los americanos iban a salir con el chip cambiado y más que con la intención con la necesidad de dar un golpe encima de la mesa si querían presentar batalla a un equipo europeo que ha salido supermotivado este viernes al comienzo del torneo.
Después de la sabia decisión de Donald de cambiar el orden de los Fourballs y los Foursomes, por la tarde, el cuarto y último partido del día en salir fue el de Rory Mcilroy, que había ganado su partido por la mañana con Matt Fitzpatrick que debutaba en esta edición. Sus rivales fueron en esta ocasión Collin Morikawa y Xander Schauffele. Los dos habían jugado por la mañana perdiendo por separado sus dos partidos y esta tarde los dos volvieron a perder, pero esta vez por separado.
Y lo más sorprendente ha sido el resultado, pero viendo como han jugado McIlroy y Fitzpatrick es fácil de entendre un marcador tan sencillo para los europeos.
En los nueve primeros seis hoyos seguidos para los de Luke Donald que ganaban el 2, 3, 4, 5, 6 y 7 para sentenciar el match casi antes de terminar el 9. En los nueve segundos las cosas no cambiaron mucho y ya manteniendo el motor al ralentí Europa veía como los americanos ganaban en el 11 para reducir distancias a cinco de diferencia y después el 12 para empatar el 13 y el 14 y en el 15 McIlroy con un gran segundo golpe cerraba el match que suponía el 5,5 para Europa tras el medio punto logrado unos segundos antes por Hovland y Hatton ante Spieth y Thomas.
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No(
