El barcelonés Pablo Larrazábal que ayer terminaba como el mejor español de los cuatro en la primera jornada del PGA Championship, terminó este viernes con cinco bogeys, sin ningún birdies y, seguramente, con peores sensaciones que en una primera jornada muy buena para él.
Larrazábal, que bajó cuarenta y cuatro posiciones en la tabla para situarse cerca de la quincoagésima plaza asegurándose el corte -su segundo en ese torneo y su quinto en torneo del Grand Slam- y hoy empezando en el hoyo 1 con un bogey que luego repitió en el hoyo 6 para acabar con un parcial de +2 y con un total de +1 que le dejaban opciones de poder mejorar en la segunda parte de su vuelta.
Sin embargo, del 10 al 18 las cosas no le fueron mucho mejor terminando con tres birdies más y finalizando con errores en el 11, el 15 y el 18 para acabar con esos +5 y +4 en el total que parece que le dejarán el fin de semana en el torneo con la obligación por su juego y experiencia de mejorar algo más en la tabla.
"Seguramente, estoy con la mejor actitud de mi carrera, pero no puedo lucyhar contra el tempo. Si juego bien y hago las cosas como las tengo que hacer tendré opciones de hacer cosas importantes, pero todo pasa por ahí", dijo.
Si (
No(
