Más cerca de Lexi que de Dustin

Sin hacer de menos al Joburg Open o lo demás que se ha jugado este pasado fin de semana, ¡qué bonito y entretenido de ver ha sido el QBE Shootout de Greg Norman! Doce parejas de jugadores enfrentándose durante tres días y jugando tres modalidades distintas.

El primer día se juega “scramble”, con dos salidas de la que se escoge una, y desde ese punto disparan los dos jugadores. Se marca la posición de la mejor bola de las dos y desde ahí se repite el proceso hasta terminar el hoyo. Además de ser una de las modalidades de juego más divertidas que conozco, cuando la practican estos monstruos consiguen resultados como el de la pareja ganadora, O’Hair y Stricker, que firmaron cincuenta y siete golpes, menos quince. El segundo día la fiesta es menor, pues se juega a golpes alternos pero también con dos salidas. No es el mismo caso de una Ryder o una Presidents, sino que salen ambos jugadores, eligen la mejor colocada de las dos bolas y golpea el que no sea propietario de la misma.

El último día se juega a mejor bola, modalidad que exige que la pareja no haga hoyos sobre el par, aunque no proporciona resultados tan abultados como el primer día. Con este sistema el torneo resulta muy entretenido, magnífico como exhibición y permite licencias como que uno de los jugadores sea Lexi Thompson. Haciendo pareja con Tony Finau, Lexi ha jugado más que bien y se ha apuntado un cuarto puesto. Aunque el tercer día iba más apurada con su “drive”, que le hacía jugar palos mucho más largos desde la calle por los treinta y tantos metros más que medían los hoyos respecto a la salida de damas,

Thompson ha pegado muy buenos hierros y ha demostrado que tiene un sitio en este torneo cuando quiera jugarlo. Ver jugar a las chicas siempre gusta porque suelen tener un “swing” bonito y dentro de los límites humanos, algo que no podemos decir de los hombres. No digo que yo vaya a ser capaz de hacer el “swing” como Lexi, pero desde luego me acercaré más que al de Dustin Johnson. Por cierto, me ha encantado el precioso movimiento y el vuelo de bola de Lowry, que ha quedado segundo junto a McDowell.

¡Ah!, y permitidme felicitar tanto a Alejandro Aguilera por su victoria en Baleares, como a su padre, que es amigo personal y casi tan bueno como su hijo.