Los circuitos satelites, son eso, nada mas ni nada menos, escuelas donde se forjan los campeones del futuro.
El gran beneficiado de esta segunda prueba disputada en Dragon Lake de Guangzhou ha sido el taiwanés afincado en San Diego, Sam Chien, que con su victoria ve cómo desde el sur de China da un salto desde el puesto 1.179 al 639 del ranking mundial.
Su carrera comenzó en 2012 y es una de las grandes esperanzas del golf asiático. Otros grandes avances han sido los del chino Ze Cheng (del puesto 1.529 a la 866, subiendo 663 plazas) y del brasileño Lucas, que alcanza la posicion 746.
Empiezan los frutos de chinos y brasileños de cara a Brasil 2016.