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En diciembre tambien hay caviar

jueves 16 de diciembre de 2010, 00:00h
Parecía que la temporada estaba ya casi finiquitada, que apenas quedaban por jugarse los típicos bolos de fin de año y que todo estaba ya casi sumado y cerrado con un buen balance para el golf español de cuatro victorias para los chicos -tres en Europa y una en EE.UU, con Sergio García-  la Ryder Cup, el triunfo en el Challenge de España de Eduardo de la Riva y las tres victorias de las chicas, una de ellas en EE.UU, con Azahara como protagonista y los dos triunfos de Carlota, además de su número 1.
Pero todavía quedaba lo mejor: la confirmación de que en Asia, donde tantas alegrías hemos tenido durante muchos años en el golf masculino, Sergio García iba a firmar una vuelta de ensueño, con 61 golpes en la tercera y última jornada y una segunda vctoria que, de nuevo, hace que cierre una temporada sobresaliente.

El castellonense ha tenido este año un rush final, tanto en Europa como en Estados Unidos, fantástico. Su victoria en el Wyndham Championship a última hora le sirvió para entrar an la Ryder Cup, para demostrar que seguía con toda la ilusión del mundo y para sumar en 2012 una primera victoria que no había llegado aun.

Con esa victoria, Sergio cogió nuevas fuerzas, jugó por méritos propios una gran Ryder Cup y cerró una temporada con una operación en sus ojos que le tuvo casi dos meses sin jugar. Tras la recuperación, el de Castellon a vuelto con el punto de mira ajustado pateando como nadie y demostrando a todos que en diciembre tambien hay buen caviar en el mundo del golf.

Ese putt maldecido tantas veces le ha dado este domingo de casi madrugada en España una nueva victoria que cierra su temporada con dos triunfos, una Ryder, más arriba de la vigésima posición del Ranking Mundial -ya veremos el lunes donde está- y con la sensación de que 2013 puede ser su año.

Pasados los 30 Sergio empieza a estar en su momento de plena madurez.. Da la sensación que ya va llegando la hora de que el de Castellón llegue a un Major -da lo mismo cual sea de los cuatro- y consiga la victoria.
Esto no es presión para él. Todo lo contrario. Es la demostración palpable que puede jugar así en cualquier campo y en cualquier torneo del mundo. Que cuando las cosas salen y se hacen bien terminan de la mejor manera posible y que la actitud de ahora es la que tiene que tener para estar siempre en lo más alto.

Carlota y él, Azahara y Jiménez, Chema Olazábal, Gonzalo Fernández Castaño, Rafa Cabrera Bello,
los que han sacado la tarjeta este año en el PGA, las chicas en Estados Unidos -Belén Mozo, Beatriz Recari, María Hernández, las que luchan por sacarse la tarjeta en Marruecos y la cantera del jovencisimo golf español, que es mucha y muy grande, tienen en sus manos el futuro más o menos prometedor de este deporte en nuestro país.

Este año que viene tiene que ser el definitivo, el de la explosión, el de los Majors que de, definitivamente, ese salto de calidad que el golf español está pidiendo a gritos desde que Chema Olazábal ganó su segunda Chaqueta Verde en Augusta.
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