lunes 29 de octubre de 2012, 00:00h
Hay una expresón, de las muchas que se oyen por Navarra, que me encanta. Es aquella que dice "ver venir", que significa lisa y llanamente que las cosas irán llegando. Eso supone trabajo y paciencia,dos cosas que Carlota Ciganda ya ha demostrado tener de sobra.
Era un secreto a voces que Carlota Ciganda tenía futuro con el golf. Ganadora de todo en el mundo amateur, este año, como profesional, no ha defraudado. En lo que va de año ha ganado dos pruebas, la de Holanda y ahora en China. Su segunda victoria en el LET ha sido además contundente, con récord en el campo de Suzhou Taihu Internacional Golf Club de China, con un total de -17 y una última tarjeta de 64 golpes con oho birdies sin bogeys, y aventajando en siete a su máxima rival en el Orden de Merito, Caroline Masson.
La navarra añade a sus dos victorias, siete top ten, cuatro top 20 y dos top 25. En el British terminó en el puesto 17, en el Evian en el puesto 24, y en el US Open en el puesto 39. Son números que confirman su posición de liderazgo nada más empezar su carrera profesiona, donde ya es la 58 del mundol. Es la mejor rookie del LET y aspira a ganar el Orden de Mérito en su primer año, algo que hizo otra grande, Laura Davies, con 22 años y dos meses. Ciganda lo hará con algunos meses más.
Pero lo mejor de todo es que la jugadora navarra no se inmuta. "Ver venir" parece pensar. Ya ha asegurado que de momento no tiene intención de imitar a sus compañeras Azahara Muñoz, Belén Mozo, María Hernández y Elisa Serramiá, en el Circuito LPGA, el más importante del mundo. Lo ha dicho en numerosas ocasiones, como la entrevista que le hizo nuestra compañera Lola Torres en este diario digital, o la que le ha hecho Guillermo Salmerón esta semana tras su triunfo en China. Ciganda quiere mantener el ritmo en Europa, coger experiencia (más de la que ya tiene), y probar quizá más adelante sin prisa.
Trabajo, los pies en el suelo, paciencia y sobre todo humildad, hacen de Carlota Ciganda toda una estrella del golf mundial que, aunque ya está brillando, tiene todavía mucho por recorrer, siempre con una mentalidad que está demostrando dar frutos, la de no impacientarse y esperar acontecimientos. En una palabra, "ver venir".