Adam Scott lo tuvo en su mano pero demostró no estar preparado, como no lo estaban Rory McIlroy en el Masters de 2011 o Dustin Johnson en el US Open de 2010 en Pebble Beach, mientras que Ernie Els iniciaba su última vuelta sabiendo que era casi imposible pero demostró estar preparado.
La duda es si Scott superará lo sucedido a corto plazo o no. McIlroy sí lo hizo ganando dos meses después el US Open de Congressional pero eso está al alcance de muy pocos, de los especiales, de los que han nacido para hacer historia en el golf.
El que para mí es el mejor jugador del mundo, Tiger Woods, tampoco supo gestionar bien su vuelta. Un triple bogey en el hoyo 6 le dejó tocado y su escaso acierto con el putter hizo que definitivamente se quedara sin opciones. No obstante terminó tercero y avanza en el Ranking mundial hasta la segunda posición. Yo creo que Tiger sí que ha vuelto y que su ausencia durante los últimos años no se ha debido a sus problemas personales sino a un cambio de swing, provocado por sus muchas lesiones, al que ya le va cogiendo el truco.
En cuanto a los españoles destacar el Top Ten del Pisha que le da la opción de volver al Open el año que viene y compensa la pobre actuación del resto de compatriotas, de los que esperábamos más.
La victoria de Ernie Els no viene dada por demérito de sus rivales. Luchó por ella de principio a fin y fue de los pocos que jugó bajo par en la última jornada. El sudafricano sabía que el domingo, en un Major, puede suceder cualquier cosa y que estando en los “60” daría guerra y así fue. Ha vuelto un “Grande”. Bravo Ernie, ya van cuatro. No cabe duda de que tú sí eres especial.