Un gran Open de España

Llegar al centenario en un torneo de golf no es, desde luego, nada fácil. En España puede que tenga más mérito todavía que en países eminentemente golfístcos como pueden ser Inglaterra o Estados Unidos, donde se juegan los cuatro majors desde hace muchos años.

El Open de España -este año Reale y esperemos que por muchos más- ha vuelto a elegir el Real Club de Golf de Sevilla como sede por tercera vez en su historia. Lo de la rotación es una excelente idea, sobre todo si los campos elegidos están al nivel de un recorrido hispalense que es ya uno de los mejores de Europa.

La organización de la R.F.E.G. ha sido espectacular, incluido el trato y el servicio a los medios de comunicación, también sobresaliente, como también lo ha sido la apuesta de sacar el golf a la calle haciéndolo llegar a todos los rincones de la ciudad de Sevilla. La respuesta del público sevillano ha sido excepcional, a pesar del mal tiempo que se ha vivido durnte toda la semana a excepción del domingo, que se ha podido ver el campo a su máxima dimensión.

La presencia de los jugadores españoles ha sido también muy destacable con la sola ausencia del castellonense Sergio García, que ha sido el único gran ausente del golf español en esta cita centenaria.

La nómina de jugadores extranjeros no ha sido mala y han dado suficiente realce a un Open de España que tiene que seguir creciendo, sobre todo en ese sentido, en el de los jugadores. Hace años, el Open lo jugaron algunos de los mejores profesionales del mundo y esta vez hemos echado de menos a alguno de los top-ten de un Ranking Mundial que daría más realce a uno de los grandes torneos del golf europeo.