Fue el caso de Rafael Cabrera-Bello –el único español que ha ganado un torneo del Circuito Europeo este año, en concreto en Dubai–, que acabó sexto con un meritorio 2 bajo par tras exhibir un juego sólido y eficaz.
Lo mismo se puede decir de Pablo Larrazábal, tercero el año pasado en el Open de España, que entregó una tarjeta de 71 golpes, muy loable si se tiene en cuenta que fue de los que jugó –y empapó– por la mañana.
Más atrás se encuentran el vigente campeón de España Profesional Agustín Domingo –puesto 24 con 72 golpes– y Álvaro Quirós, trigésimo séptimo con 73 golpes. La jornada fue menos fructífera para Miguel Ángel Jiménez y José María Olazábal, ambos con 75 golpes.