McIlroy regresa al escenario del "crimen"
martes 03 de abril de 2012, 00:00h
Rory McIrloy es un jugador diferente al de hace un año. La derrota en Augusta en la edición anterior, con 80 golpes en la ronda dominical, le han hecho madurar. Llega con un Grande bajo el brazo, el US Open logrado dos meses después del Masters; ha llegado a estar dos semanas número uno; ya ha ganado este año en el Honda Classic, y su actitud ante el primer Major es distinta. "Aprendí mucho de Augusta", dice el norirlandés que vuelve al lugar del "crimen".
El hombre es el único animal capaz de tropezar dos veces en la misma piedra. Sin embargo, Rory McIlroy no quiere cometer los mismo errores que le llevaron a la catástrofe hace justo un año en Augusta National, cuando en la última ronda salía líder con cuatro golpes de ventaja y firmó 80 golpes para terminar décimo quinto.
El norirlandés ha asegurado varias veces que su error fue pensar en los demás, y esta vez "será diferente. Me voy a centrar en mí mismo, en mi juego", asegura el número dos del mundo. Lo cierto es que McIlroy llega más maduro, con un Grande ya bajo el brazo, el US Open que logró justo dos meses después de su dolorosa derrota, y además ha saboreado las mieles del número uno sentado en el trono durante dos semanas después de ganar el Honda Classic .
"Tengo poca memoria", dice con cierta ironía un joven de 23 años que ha sabido gestionar una derrota que podía haber puesto en peligro su carrera. Una semana después del Masters, no dudó en fotografiarse con Charl Schwartzel, ganador de la chaqueta verde, quitando importancia a lo que había pasado.
Su intención en esta nueva edición de Augusta es centrarse en su juego, y no pensar en querer dominar todos los aspectos de alrededor. No quiere tropezar otra vez con la misma piedra. Sabe que muchas miradas estarán pendientes de lo que pueda hacer, pero él lo tiene claro, volverá al tee del 1 a por su segunda oportunidad, y esta vez, dice "será diferente".