El malagueño Miguel Ángel Jiménez sabe de la importancia del Masters de Augusta, sobre todo de cara a su posible inclusión en el equipo europeo de la Ryder Cup del próximo mes de septiembre. Pero antes de empezar una exigente preparación de cara al primer Major de la temporada, "El Pisha" acudió a Isla de Valdecañas, a la boda de unos amigos, donde practicó otros deportes. Evidentemente, no se le dan tan bien como el golf.
Miguel Ángel sabe que esta temporada es muy importante para él si quiere seguir manteniéndose en lo más alto del golf mundial y entre esos primeros 50 de un Ranking que no ha habandonado desde hace mucho tiempo.
Tras su buena actuación en el Open de Andalucía, Miguel encara un nuevo reto en su carrera, como es esta edición del Masters de Augusta.
El primer Major de la temporada está marcado en rojo en el calendario .jpg)
del que es, sin duda alguna, uno de los jugadores más carismáticos del mundo.
Desde ya, Miguel se prepara a conciencia para esta cita que empezará en algo menos de dos semanas pero antes tuvo tiempo para acercarse a La Isla de Valdecañas, donde dos amigos suyos, Bruno Lelier y María Dolores Ruiz, se casaban y celebraban su unión.
Una fiesta espectacular donde los amigos y familiares del novio -de origen francés- lucharon en sana competencia deportiva con los amigos y familiares de Mª Dolores -todos españoles-.
Un reto deportivo que tuvo entre otras pruebas una carrera de canoas por el lago que rodea el complejo y que sirvió para demostrar las habilidades de Miguel Ángel subido en la canoa, aunque también tuvo tiempo para darse un remojón.
Tras las canoas, hubo tiempo también para practicar en el magnífico campo de Isla de Valdecañas y para celebrar una boda realmente espectacular, donde
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