miércoles 29 de febrero de 2012, 00:00h
Rory McIlroy y Lee Westwood participan esta semana en el Honda Classic y buscarán, de nuevo, presionar al número uno, Luke Donald, que no acude a una cita donde también estarán Chema Olazábal y Alejandro Cañizares, y será una nueva prueba de fuego para Tiger Woods. Si McIlRoy logra la victoria será el nuevo rey del golf mundial.
El PGA Tour acoge esta semana el Honda Classic, una nueva prueba donde no participa el número uno del mundo, Luke Donald, y será una nueva oportunidad de sus más directos perseguidores para meter más presión. Rory McIlroy y Lee Westwood buscarán acercarse lo más posible para seguir echando el aliento a Donald, y ahora es el norirlandés el que por segunda semana consecutiva tiene la oportunidad de coronarse. Para hacerlo "tan solo" debe ganar el Honda Classic.
En la cita, además de la participación de McIlRoy, que llega com más hambre todavía después de su segundo puesto en el Accenture y su primera oportunidad perdida de alcanzar el número uno, acude Lee Westwood, que también querrá desquitarse de su derrota ante el norirlandés y después ante Mark Wilson por el tercer puesto. McIlRoy jugará con Keegan Bradley y Kyle Stanley.
Junto a ellos, los españoles Chema Olazábal y Alejandro Cañizares, éste último clasificado después de su quinto puesto en el Mayakoba Classic, y que volverá a intentar brillar en una prueba del PGA Tour. Olazábal jugará con Chris Stroud y Blake Adams, mientras que Cañizares lo hará con Erik Compton y Brian Harman.
Otra de las atenciones será la de Tiger Woods, una nueva oportunidad para el ex número uno de demostrar que ha cambiado, a pesar de su eliminación en segunda ronda en el Accenture. El Tigre saldrá con Lee Westwood y Ian Poulter, y deberá compensar sus errores y dar una señal más de su recuperación. Woods acude a Florida por primera vez como profesional en un torneo al que sí acudió en 1993 como amateur. En aquella ocasión no pasó el corte.
Una semana sin descanso donde los grandes vuelven a la carga.