El ayer, el hoy, el mañana

Carlota desde AYER, es decir desde siempre, porque es muy joven, ha tenido claro a lo que se quería dedicar, tenía un sueño que le hacía feliz y eso era el golf, esa era su felicidad. La carrera amateur de esta navarra no tiene parangón, ha sido lo más brillante conocido hasta ahora. Es feliz con un hierro en las manos y dándole a un bola, que lo normal es que ésta piense…”mejor que Carlota….nadie, aunque ¡¡¡vaya fuerza!!!”

Viví cerca de ella su primer torneo como profesional en Tenerife el año pasado y nunca había pensado que alguien tan joven podía ser tan “terca” a la hora de intentar conquistar su sueño, su felicidad y lo que es delicioso es ver como su familia la apoya de una manera incondicional. Llegó el momento de demostrar lo que vale y hacia tierras australianas se marchó hace un par de semanas.

Primer torneo de la temporada y se va allá, lejos de todo (menos de los canguros), pero le acompaña su padre, imagino que una pieza importante en la vida de Carlota.

Ella misma nos contaba a través de twitter que fue un viaje arduo, duro y muy largo, muchas horas de vuelo, varias horas de conexiones y al final y por si fuera poco, más de coche….al fín llegó y no lo hizo nada mal. Quedó la 22 aunque es cierto que acarició el Top Ten. Pero como ella nunca está conforme…se exige más y volvió a embarcarse en un avión, y volvió a dormir poco y volvió a trasladarse en coche hasta Melbourne a jugar las previas del siguiente torneo que empieza mañana…., no lo consiguió por dos golpes, pero ¡¡no pasa nada!!

La esperanza de Carlota no está en el mañana, Carlota es el ahora, el presente, ella seguro que vive el momento, pero con la diferencia horaria… en estos momentos estará descansando para volver con fuerza  y con esperanza a intentar conquistar un “hoy bien vivido que será su sueño de felicidad” .