sábado 25 de septiembre de 2010, 00:00h
Algo debe de tener el sol y la brisa marina de Málaga para que nos de tantos y buenos jugadores de golf. La Costa del Sol ha sido siempre referencia para el golf español y europeo pero ahora, con Azahara Muñoz, el mundo seguro que sabrá con más razón todavía que de Málaga son "El Pisha" y la estrella de la Solheim 2011, Azahara Muñoz.
Con tanta rubia en la Solheim Cup, la presencia de la morena Azahara Muñoz en el equipo ha sido, sin duda, un enorme soplo de aire fresco para esta competición y para un equipo europeo capitaneado por Alison Nicholas que nunca olvidará la aportación de la jugadora malagueña en una victoria irrepetible.
Es cierto que en la jornada de individuales, donde las americanas, en teoría, eran favoritas sobre las europeas, se ha dado la vuelta a la tortilla por completo. Se necesitaban 14 puntos y medio y 14 y medio se han conseguido.
Azahara jugaba en el penúltimo partido, que a la postre fue el último, y su birdie en el 17, el que la ponía por delante, dio por seguro el medio punto que Europa necesitaba para ganar la copa por cuarta vez en la historia de esta competición.
Azahara no se creía lo que estaba viviendo. Es como si hubiera vivido en apenas una semana un año de competición de máximo nivel, cien Majors o algunos de los mejores torneos del Mundo. Ahora, tras esta actuación, Azhara ya es una de las grandes jugadoras europeas aunque juegue en Estados Unidos y quizá su fuerza, su coraje y su determinación sirvan para que el golf femenino español vuelva a pegar un nuevo acelerón de cara al futuro.
A lo mejor Azahara es la figura que nuestro golf femenino necesitaba para que las nuestras sigan posicionandose en Europa, en Estados Unidos y se equiparen a los grandes logros de los chicos, entre otros los conseguidos por otro malagueño de pro, Miguel Ángel Jiménez.