Adam Scott rompe el Bridgestone con 62 golpes
viernes 05 de agosto de 2011, 00:00h
La primera jornada del WGC Bridgestone ha comenzado con la baraja rota. Adam Scott se ha encargado de ir a por todas con una tarjeta de 62 golpes (-8), y aventaja en un golpe a Jason Day, en un día en el que Tiger firmó 68 golpes y el mejor español fue Pablo Larrazábal con -4.
El balón ya está en juego y el partido confirma las expectativas que se habían creado. Adam Scott se ha colocado líder tras la primera ronda del WGC Bridegestone con una tarjeta de 62 golpes (-8), igualando el récord de Tiger en una de sus siete victorias. Con ocho birdies sin errores se ha colocado en cabeza y tiene un golpe de ventaja sobre Jason Day, en un duelo australiano que promete.
Para Scott "el día estaba perfecto para hacer buenos resultados".Lo cierto es que ha habido buenas tarjetas, pero no tanto como para igualar al australiano. Su compatriota Jason Day también ha tenido buen día y se ha quedado a un golpe, mientras que NIck Watney es tercero con -5.
Por detrás, con -4, varios jugadores, hasta nueve, entre los que se incluye Pablo Larrazábal, el mejor español, que acechan a los jugadores de la cabeza. Sergio García, por su parte ha terminado con -2 y peor comportamiento para Álvaro Quirós y MIguel Ángel JIménez que se han quedado con +3 muy atrás en la clasificación.
Los favoritos también restan. Tiger Woods ha terminado con 68 golpes en un partido que ha sido el más atendido por la afición, después de 12 semanas de ausencia del ex número uno. Tres birdies y un bogey le han dejado con -2 empatado con otros 13 jugadores.
Por su parte, el número uno, Luke Donald, tampoco ha querido quedarse muy atrás y ha firmado también 68 golpes, lo mismo que McIlroy. Mejor le ha ido a Lee Westwood, con -3, muy sólido, mientras que Kaymer con -1, y McDowell con +1 no han brillado demasiado.
Quien sí ha llamado la atención es Darren Clarke, que ha jugado con Tiger y no le ha sentado bien porque ha terminado con +7, con siete bogeys, uneagle y un doble bogey, sin duda una tarjeta tan sorprendente como los 62 de Scott, que rompen la baraja para ver un espléndido Bridgestone.