Pero para lograr su sueño, Colin Montgomerie, ex capitán de la Ryder Cup en 2010, necesita terminar entre los cinco primeros. Un reto complicado, pero no imposible para este escocés ganador en ocho ocasiones de la Orden de Merito del Viejo Continente y que quiere, sobre todo, volver a recuperar su lugar en el escalafón mundial.
Pero no todo fueron buenas noticias para Monty, que pudo haber terminado mucho mejor en la clasificación si además de los cuatro birdies y el eagle que firmó no hubiera hecho bogey en el hoyo 9, su último hoyo, colocándose finalmente a dos golpes de la cabeza.
"Estoy un poco decepcionado. Jugué muy bien, como no lo había hecho en bastante tiempo y si no hubiera fallado la calle del último hoyo podría estar mucho más arriba en la clasificación”.
Monty, que nunca ha ganado un torneo del Grand Slam aseguró que si se clasifica para el Open tendrá muchas opciones de poder por fin conseguir su sueño y ganar un Open Británico. Pero no va a ser fácil para este jugador que durante su capitanía en la Ryder bajo hasta el puesto 420 del Ranking Mundial. Ahora las cosas van normalizándose.
Ya se encuentra en el 285 y si hace un buen papel en el Scottish Open podría subir hasta meterse entre los 50 primeros continuando la progresión presentada en las últimas semanas donde terminó séptimo en el PGA de Wentworth, en Inglaterra, y el BMW International Open en Alemania donde terminó décimo octavo.