Sergio García regresa al futuro

Sergio ha vuelto. Ya lo había avisado este año con buenos resultados y buenas tarjetas. No ha ganado pero ha estado muy cerca, más de lo que ha tenido en el último año y medio, 18 meses en los que el de Borriol ha recuperado la sonrisa tras una caída al vacío desde el puesto 2 del ránking mundial.

Este año, tras un parón voluntario para recapacitar y tomarse un descanso, ha vuelto con nuevas fuerzas, y ha recuperado la sonrisa. Con paciencia, sabiendo que en el golf es fundamental dar los pasos necesarios, Sergio lleva una temporada ascendente y ya no esconce su objetivo de volver a estar entre los 50 mejores del mundo e incluso más allá.

En Europa, desde los Emiratos Árabes en enero, ha firmado ya un triségimo puesto, un noveno en Qatar y un vigésimo en Dubai, además del puesto 22 en el Volvo de China y ahora un segundo puesto en Munich. Ya había avisado hace dos semanas en el US Open, con su séptima plaza, en un Major al que había accedido tras una dramática previa con un play off y un putt de seis metros que le dio el pase. Ahora se ha vuelto a clasificar in extremis para el British, todo un presagio, quizá, para que el de Castellón llegue a St. George con más fuerza.

En el PGA Tour, con un puesto 35 en el Masters, ha terminado octavo en el Arnold Palmer, y en el puesto 12 en The Players, 15 en el Transtitions y 16 en el Crowne Plaza, unos resultados que confirman que Sergio ya está de vuelta y ahora sólo toca pensar en el futuro.