Sin embargo algunas celebridades hacen algo más en el entorno del golf y, uno de los destacados, Justin Timberlake. Además de organizar el torneo solidario Shriners Hospitals Open Golf Tournament, el antiguo líder de *NSYNC decidió hace varios años impulsar un campo de golf en el estado que le vio nacer y partiendo de esa idea se ha consolidado el proyecto de Mirimichi Golf, el club en donde aprendió a jugar cuando era niño y que se encontraba en un comprometido estado de conservación y próximo a desaparecer.
Este campo público, antes conocidos como Woodstock Hills Country Club y luego como Big Creek Golf Course, ha sido remodelado, rediseñado, reacondicionado y en parte reconstruido teniendo en cuenta la preocupación de JT por el medio ambiente, es decir, persiguiendo la mayor y mejor integración ambiental posible y garantizando el posterior mantenimiento sostenible de las instalaciones. Después de meses de trabajo y varios millones de dólares invertidos el resultado es un espectacular campo de profundos bunkers, elevados greens, densas calles y serpenteantes arroyos con cascadas que conforman un recorrido de golf de alto nivel capaz de acoger torneos importantes.
El compromiso de Justin Timberlake con el medio ambiente ha sido reconocido por varias instituciones independientes ya que Mirimichi Golf se ha convertido en el primer campo norteamericano que recibe el GEO Certified de Golf Environment Organization, así como también el primero en los Estados Unidos que alcanza el certificado Audubon Internacional Classic Sanctuary convirtiéndose así en el único campo en el mundo poseer ambas denominaciones. Igualmente la nueva casa club ha recibido el certificado Platinum LEED del U.S. Green Building Council como reconocimiento a los valores de construcción sostenible en ella desarrollados.
En Mirimichi Golf se emplean diversas metodologías sostenibles encaminadas a, por ejemplo, reducir el consumo de combustible, herbicidas y pesticidas al emplear vegetación (especies cespitosas, herbáceas, arbustivas y arbóreas) adaptadas a las condiciones ambientales locales, combatir con peces las plagas en lagos y lagunas, optimizar el consumo de agua de riego, potenciar la depuración de aguas residuales o reducir el consumo de electricidad. Estas y otras iniciativas hacen de este campo un ejemplo y una replicable apuesta por el golf sostenible.