Y es que la estadística tampoco nos es muy favorable. De los seis últimos eventos deportivos internacionales que se “han puesto en juego” y en los que España participaba, en dos de ellos la respuesta ha sido positiva para las candidaturas españolas mientras que el no ha salido en nuestra contra en cuatro ocasiones.
La primera negativa fue la que “nos quitó” los Juegos de 2012. Moscú, Nueva York, París y Londres eran nuestras rivales y una pregunta sobre el terrorismo y la inseguridad por parte del Príncipe Alberto de Mónaco -¿se acuerdan?- hizo que la elegida fuera entonces Londres, según dicen, con una candidatura virtual, pobre y mucho peor que la de Madrid.
Madrid y su alcalde a la cabeza se volvieron a presentar para los Juegos de 2016. Una decisión parece que no muy acertada ya que la teoría de la rotación de los continentes jugaba en nuestra contra. A pesar de eso Madrid fue candidata y la famosa rotación se llevó a efecto ganando Río de Janeiro, que albergará por primera vez unos Juegos en Sudamérica.
El tercer no de esta serie lo recibió hace apenas unos días la candidatura de Tarragona, que quería albergar los Juegos del Mediterráneo de 2017. Pero como deben de estar las cosas para que entre rivales como Alejandría, en Egipto, Trípoli, en Libia, Rijeka, en Croacia y Mersin en Turquía, Tarragona viera como sus sueños no se cumplían y la sede fuera la de Mersin.
Y la cuarta en la frente, el mundial de fútbol. Después de 1982 -¡anda que no hace años de eso!, España se presentaba junto a Portugal -para aunar lazos de sangre entre países hermanos- con el respaldo de ser la última campeona de Europa y la última campeona del Mundo.
Pues ni así. Ni siendo los grandes dominadores del fútbol profesional en el mundo entero nos vale para que nos den un gran evento internacional. La palma se la llevó Rusia, que organizará en 2018 su primer mundial de futbol, quizá gracias a la apuesta económica que hicieron, muy superior a la hispano-portuguesa, a la inglesa y, por supuesto a la belga-holandesa.
En cuanto a los síes, España cuenta con dos grandes eventos que nos salvarán de esa falta de eventos de primer nivel deportivo en nuestras fronteras en los próximos años. Uno será el mundial de balonmano, que se disputará en 2013 y al que no se presentó ningún otro candidato. Y el otro el de baloncesto de 2014, que se organizará en nuestro país después de derrotar a China e Italia, que también querían albergar esta competición.
La Ryder Cup de 2018 se decidirá en Mayo, el próximo día 17. Nuestros rivales son esta vez Portugal, Francia, Alemania y Holanda. Veremos qué pasa. De momento, la estadística parece decir que tenemos bastantes posibilidades.
España ya ha acogido Juegos Olímpicos, Mundiales de fútbol, de baloncesto, finales de Copa Davis, Juegos del Mediterráneo, Campoenatos del Mundo de motociclismo y automovilismo y hasta una Ryder Cup, la de1997 en Valderrama. Ojalá que toda esa experiencia nos de otra oportunidad para acoger uno de los eventos más importantes del mundo del deporte.
Los noes
Competición Año Organizador Candidatos
Juegos Olímpicos 2012 Londres Madrid, Moscú, Nueva York y París
Juegos Olímpicos 2016 Río de Janeiro Madrid, Chicago, Tokio y Japón,
Juegos del Mediterráneo 2017 Mersin Tarragona, Trípoli, Rijeka y Alejandría
Mundial de Fútbol 2018 Rusia Esp./Port., Bél./Países Bajos e Inglaterra
Los síes
Mundial de Balonmano 2013 España Ninguno más
Mundial de Baloncesto 2014 España China e Italia