El español Ignacio Garrido pasó de liderar el Abierto de Singapur al término de la primera jornada a hundirse, mientras que el australiano Adam Scott es el que manda ahora cuando, por falta de luz, no se pudo completar la segunda ronda.
Garrido, que el primer día se situó en cabeza con una espectacular tarjeta de 62 golpes, vivió la cruz este viernes al acabar con 79 y un total de 141, cifra insuficiente para pasar el corte, fijado en 140, y seguir en liza, aunque una treintena de jugadores deben terminar mañana su vuelta.
Ocho 'bogeys' y un 'doble bogey' dilapidaron las opciones del español, que logró tan solo dos 'birdies'. Scott, ganador en el Sentosa Club en 2005 y 2006, encabeza la tabla con 130 golpes tras sumar su segundo 65, y aventaja en dos impactos al inglés Ian Poulter, defensor del título, que brilló en esta ronda con un 63.
Rafael Cabrera-Bello es el primer español. Es decimoquinto con 136 impactos, a seis de la cabeza, mientras que Miguel Angel Jiménez es vigésimo sexto pero le quedan tres hoyos del segundo recorrido por disputar.
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