Carlos Balmaseda ve la luz al final del túnel
viernes 08 de octubre de 2010, 00:00h
Carlos Balmaseda lleva un mes de oscuridad pero esta semana ha comenzado a ver la luz. Recién infiltrado ha dejado atrás los dolores de su hernia de disco cervical y ya piensa en comenzar a entrenar esta misma semana. "Estoy animado aunque no descarto la operación", dice.
Balmaseda se ha acercado al RACE para ver competir a sus compañeros en el Peugeot Alps de España y a darles ánimo. Junto al putting green el madrileño ha recibido el cariño y el apoyo de muchos jugadores que han ido pasando por allí. Álvaro Salto, Raúl Quirós, que van líderes en la prueba, Ismael del Castillo, Diego Suazo, Vicente Blázquez, Pablo Herrería, José Manuel Carriles...han sido algunos de los muchos que se han interesado por la evolución de Balmaseda.
Carlos lo ha agradecido enormemente. "Es una satisfacción ver que en los momentos malos también hay gente que está ahí", dice. Lo mismo opina de sus patrocinadores. "Te das cuenta de quién está ahí en los momentos malos y todos mis patrocinadores se están portando muy bien conmigo, apoyándome en todo", comenta.
Desde hace un mes, Balmaseda está parado, sin moverse y casi sin poder dormir del dolor. Tiene una hernia de disco cervical en las vértebras C5 y C6 y no puede ni jugar ni entrenar. Esta semana le han infiltrado y se encuentra mucho mejor. "Empiezo a vivir. Los dos últimos días he podido dormir ocho horas", dice con satisfacción. "He descansado porque llevaba 25 días sin pegar ojo por el dolor".
Ahora debe esperar a que haga efecto la infiltración pero ya tiene pensado iniciar sesiones de fisioterapia y comenzar a entrenar el putt y el aproach. Su objetivo es la PQ2 de noviembre y tiene tres semanas para prepararse bien. En todo caso hay que ver la evolución y no se descarta la operación. Si con la infiltración y los primeros entrenamientos no desaparece el dolor, el madrileño preferirá descartar la Escuela y pensar ya en la temporada que viene.
Precisamente no le faltan fuerzas para pensar ya en el próximo año. A la espera de lo que pase en la Escuela, Carlos cuenta con el Alps y le gustaría contar con más pruebas en España. En todo caso, las miradas están puestas en prepararse bien de cara a la PQ2 y esta semana ha comenzado a ver la luz del túnel con ese anímo que le caracteriza.