No sabemos que pasará mañana pero el golf mundial y sobre todo el norteamericano anda revolucionado con la posibilidad de que Phil Mickelson sea, por fin, número uno del mundo. Para que esto suceda, que da la impresión que terminará sucediendo, el lunes Phil, más conocido como "Lefty", tendría que hacerlo muy bien en el Deutsche Bank y terminar entre los mejores.
Pero hay muchas posibilidades de que esto suceda. Si el torneo acabara como está ahora, es decir Mickelson sexto, con -12 y Tiger Woods vigésimo tercero, con -7, Mickelson no sería a partir del martes nuevo número uno mundial después de cientos de semanas con Tiger en lo más alto.
Para que esto sucediera tendría que meterse entre los cuatro primeros para desbancar a un Tiger Woods que se resiste a abandonar esa atalaya mundial. Pero hay más posibilidades.
Si Mickelson gana Tiger, haga lo que haga, perderá ese número uno. Lo mismo sucederá si Phil Mickelson queda tercero y Tiger no supera la novena posición. Si Mickelson acaba segundo y Tiger lo hace por debajo de la sexta posición también será nuevo número uno del mundo, lo mismo que si queda por encima de esa cuarta plaza y Tiger ni supera la vigésimo tercera.
De momento todo está en el aire. Mañána será otro día y quizá el de una nueva era para el golf mundial, con Mickelson como número uno del mundo y Jiménez subiendo puestos semana a semana.
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