Está claro que el Royal Trophy no es la Ryder. Sin embargo es el primer ensayo de Colin Montgomerie en este 2010 de cara a la importante cita de octubre en el Celtic Manor de Gales.
El Royal Trophy ha mostrado algunos detalles interesantes, y el primero de ellos es la llamada a Pablo Martín Benavides. El malagueño ha respondido a las expectativas y ha ganado el punto definitivo venciendo al tailandés Prayad Marsaeng por 2 y 1. Además Montgomerie ha mimado a Benavides y le ha puesto a su vera en la primera jornada, con los foursomes.
El escocés ya ha dicho en varias ocasiones que lleva tiempo observando a Pablo. La victoria en el Dunhill y su sexto puesto en el Open de Sudáfrica, más la buena actuación en Tailandia hacen que Pablo pueda ver la Ryder de lejos. Tiene nueve meses para soñar. Lo cierto es que Montogomerie tiene hasta tres puestos para elegir a dedo.
Otra de las cosas que el capitán ha dejado entrever ha sido el buen hacer en el cambio de fourballs a foursomes. Monty salió a jugar con Benavides en la pimera ronda, pero en la segunda puso al joven malagueño con Stenson, mientras que Dyson, que estuvo con el sueco en los fourballs, pasó a formar pareja con el propio Montgomerie en los foursomes. Precisamente éstas fueron las parejas que perdieron el primer día y ganaron el segundo.
Monty ha dejado más claro que tiene el espíritu y la conciencia de capitán, y puede devolver la gloria a Europa dentro de nueve meses.
Si (
No(
