El pasado de nuestro golf es brillante y no sólo por Seve Ballesteros y sus triunfos, él hizo que éste deporte cambiara no solo en España, su juego y sus triunfos cambiaron el golf en el Mundo. El Golf era ese deporte que practicaban unos cuantos señoriítos y que no admitían advenedizos. Severiano Ballesteros lo cambió a golpes. Golpes buenos y mejores. Golpes largos y certeros. Golpes magistrales e inimitables. Golpes que no dejaron KO a éste deporte en España y Europa, todo contrario.
El sábado pasado con motivo del 40 aniversario de la Federación Madrileña de Golf, pude descubrir una vez más que nuestro golf tiene futuro y mucho pasado, un pasado enorme y estelar. Campeones del Mundo. Ganadores de la Ryder y triunfadores de muchos y grandes torneos. Ese ayer construyó el presente y el hoy nos tiene un mañana preparado para sonreír a base de embocar hoyos bajo par. La base lo es todo en el deporte del golf y en otros para triunfar. Por suerte y por el trabajo también, el golf español tiene futuro. Un excelente futuro si la suerte nos acompaña un poquito.
Iñaki Cano es periodista
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