"Con estrés respondo mejor", dice Jason Day que se siente como en casa. A los 18 años jugó en Oakmont por primera vez y piensa que "ninguno de los Grandes es tan agotador de tee a green como el US Open".
El número uno del mundo asegura que estar en el trono mundial "es duro porque tienes más presión sobre los hombros para ganar". En todo caso piensa que eso le beneficia, que juega mejor cuando tiene más presión. Y lo demostró cuando estuvo jugando con vértigos o con dolores de espalda este año.
Dayse siente bien a pesar de un resfriado que sufre esta semana, y avisa de que "siento que tengo buen tacto en los greenes". La actitud positiva le lleva a tener buenos sentimientos esta semana. Además de los cinco Us Open que ha disputado, ha terminado top ten en cuatro de ellos, incluyendo dos segundos puestos en 2011 y en 2013. "Quiero ganar en este momento. Lo quiero más que nada en el mundo", dice rotundo.