El video de la polémica que indigna al golf profesional: ¿hizo trampas el golfista inglés Sam Bairstow?

Es el video que ha dado la vuelta al mundo en las últimas horas, “el de la vergüenza”, como argumenta algún profesional de golf. Su difusión ha corrido como la pólvora en grupos de golf y entre los profesionales que se dedican a este deporte. Muchos de ellos no entienden la sanción tan laxa que el DP World Tour ha impuesto al golfista inglés Sam Bairstow después de ver estas imágenes.

Es jueves y se disputa la primera jornada del Nexo Championship en el Trump International Links de Aberdeenshire. El golfista zurdo de 27 años se encuentra en el hoyo 14; la bola está suspendida en un rough alto, mucho más elevada que la posición del jugador. Este se coloca para golpearla, hace un par de waggles, posiciona la cara del palo junto a la bola y, de repente, comprueba con sorpresa que la bola cae de su posición y se mueve aparatosamente. La secuencia prosigue con unos segundos de duda: el inglés sale del stance, mira a un lado y a otro, e incluso habla con su caddie durante unos segundos antes de colocarse nuevamente para ejecutar un nuevo golpe, como si no hubiera pasado nada. Finalmente, se marchó del hoyo 14 tras firmar un par, cuadno en realidad deberñian haber sido 7 golpes.

La secuencia fue sacada a la luz por el periodista James Corrigan en el Daily Telegraph. En ningún momento Sam Bairstow reclama la presencia de un árbitro, lo habitual en estas situaciones, ni comenta nada del incidente. Hasta que, al firmar la tarjeta, con el cinco apuntado en su hoyo 14, le notifican que existe un video grabado por un aficionado, que compartimos en El Periodigolf, donde se aprecia claramente toda la secuencia.

La existencia de toda la grabación provoca finalmente que Sam Bairstow se autodescalifique. El DP World Tour decidió sancionar al jugador con 25.000 libras, la multa máxima tras el incidente, al considerar que el inglés estaba violando el código de conducta del tour. Sin embargo, para la mayoría de sus compañeros, la sanción se queda corta, y esperaban un castigo más ejemplar por lo que consideran un acto completamente intencionado y deliberado contra las reglas del golf.

Al margen del dinero, que es casi una anécdota, algunos jugadores han reclamado que el circuito debería haber sancionado al golfista infractor con una prohibición de disputar torneos durante un tiempo. Por su parte, desde el entorno de Bairstow afirman que el jugador está afectado y ha pedido disculpas a sus compañeros, reconociendo su error.