¿Será capaz el número uno del mundo Scottie Scheffler de remontar seis golpes de desventaja en la última jornada del Charles Schwab Challenge?. El jugador tejano parecía descartado después de el +1 del segundo día, pero ayer protagonizó una impresionante remontada que le dan la posibilidad de pelear hoy por algo más que una buena posición. Scheffler, que comenzó la jornada empatado en el puesto 49, escaló hasta el séptimo puesto con un total de 7 bajo par, compartido con Andrew Novak y Kurt Kitayama. Sin embargo, como mencionó Griffin al finalizar su ronda, en un campo como Colonial, donde la paciencia y el control son clave, cualquier ventaja es provisional. La historia demuestra que no existen líderes seguros en este torneo, y la presencia de campeones como Nick Price y Sam Burns, que han ganado con desventajas de siete golpes, solo refuerza esta idea.
En el liderato Ben Griffin y Matti Schmid están empatados en la cima con 13 bajo par. La tercera ronda en Colonial Country Club, en Fort Worth, Texas, se desarrolló en condiciones desafiantes, con viento y calor que aceleraron el ritmo de los greens, pero los dos jugadores supieron adaptarse y mantenerse firmes en la lucha por el título. Griffin y Schmid no solo se mantienen al frente, sino que han sido constantes en sus rendimientos, firmando tarjetas de 66, 63 y 68 golpes, respectivamente, a lo largo de los tres días. En tercer lugar se encuentra Rickie Fowler, quien con un sólido 3 bajo par (67) se sitúa en la parte alta de la clasificación. A tan solo un golpe de Fowler, en el cuarto puesto, se encuentran Robert MacIntyre, Akshay Bhatia y Nick Hardy, tras firmar impresionantes 64 golpes, empatando la mejor tarjeta del día junto a Lucas Glover y el número 1 del mundo, Scottie Scheffler.
Griffin es conocido por su excelente manejo del driver, se siente especialmente cómodo en este campo, destacando que el juego de los hierros y la capacidad para posicionarse correctamente es clave para el éxito. “Es un campo en el que me siento muy a gusto, el driver me permite darle forma a los tiros, especialmente en el tramo final del recorrido”, comentó el jugador de 29 años. Por su parte, Schmid ha sorprendido con su destreza en el green, liderando la estadística de golpes ganados sobre los greenes. Aunque su juego con los hierros no ha sido tan preciso como le gustaría, el alemán ha sabido responder con un putter en llamas, embocando birdies en los primeros tres hoyos y manteniéndose sólido a pesar de algunas dificultades con el viento y los tiros errados. “Fue complicado, pero me mantuve firme. El viento dificultó algunos de los tiros, pero pude recuperar terreno con buenos putts”, comentó el jugador de 27 años, quien busca su primera victoria en 79 participaciones en el PGA Tour.
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