Tras la jornada de Foursomes de la mañana donde el equipo europeo no perdió el paso en ningún momento y supo mantener la ventaja que había acumulado en las rondas anteriores a Estados Unidos sólo le vaía salir a dar el todo por el todo si no quería que la jornada de individuales del domingo fuera un mero trámite de cara a la consecución de esta Ryder Cup de Marco Simone que pasará a la historia por el dominio del los jugadores de Luke Donald frente a los de Zach Johnson.
Por la tarde, con el público volcado a la causa europea y los estadounidenses dándose cuenta de que poco tenían que hacer este año salvo milagro, comenzaba el enfrentamieno con la ausencia destacad de Jon Rahm, al que Luke Donald puso a descansar y de Scottie Scheffler que tras la paliza histórica recibida por la mañana da la sensación de que no tenía fuerzas ni ganas para jugar por la tarde.
Así las cosas el primer partido de la tarde lo compusieron para estados Unidos Sam Burns y Colin Morikawa que tenían como rivales a un Viktor Hovland y Ludvig Aberg que por la mañana habían hecho trizas a sus rivales y que por la tarde no estuvieron tan brillantes -quizá agotados mentalmente por lo que habían hecho por la mañana.
El partido se acabó en el hoyo 15 después de que los estadounidenses ganaran por un cómodo 4&3 que les daba un punto más en un marcador rojo que reflejaba para ellos un 3,5 paupérrimo y que pareceía no tener solución tras los partidos de dobles de los dos días.
El segundo partido de la jornada vespertina enfrentaba a Max Homa -seguramente el jugador más en forma del equipo norteamericano y Brian Harman, el defensor del título del The Open de este año que, por fin jugaron a su nivel y no dieron opciones a la dupla europea compuesta por Tommy Fleetwood, que está haciendo una Ryder Cup maravillosa y Nicolai Hojgaard que esta tarde parecía que no estaba en el campo.
El partido apenas tuvo historia ya que al hoyo 12 los estadounidenses dominaban por cuatro de ventaja aunque una tímida reacción de los europeos hizo que el marcador se pusiera dos abajo tras ganar el 14 y el 16, pero en el 17 dos pares de Fleetwood y Homa cerraban el partido dando a estados Unidos su segundo punto de la tarde y colocando su marcador en un 4,5 a cinco de los europeos que aún tenían dos balas en la recamara para sumar en los dos últimos partidos del día.
En el tercer match de la tarde llegó la primera alegría para el equipo europeo que con la pareja formada por Justin Rose y Robert McIntire sumó un punto valiosísimo para Europa después de llevar un match algo movido que empezaba en sus nueve primeros hoyos con dos ganados para Estados Unidos, el 4 y el 7 y otros dos para Europa, el 7 y el 9 que dejaba las tablas en el ecuador del partido para en la segunda parte Europa arrancar sus motores y tras ganar el 10, el 13 y el 14 colocarse con tres de ventaja a falta de cuatro por jugar.
En el 16 Rose, que ha vuelto a jugar de maravilla embocaba un putt de cuatro metros para firmar un nuevo birdie y dar otro punto más a Europa que alcanzaba el 10,5 situándose en ese tope que ha sido los seis puntos, diferencia máxima que se ha remontado en un partido de individuales. Una ventaja que parece dificil de recuperar teniendo en cuenta que las cosas podían mejorar aún más con el partido que aún quedaba en juego en el campo.
Pero las cosas no iban a terminar ahí con el marcador de 10,5 a 4,5. El último partido del día pintaba bien para el combinado europeo. Y es que Fitzpatrick y McIlroy habían llegado a los hoyos finales del match con uno de ventaja en un match muy igualado donde Europa había ganado dos hoyos, el 4 y el 14 y los americanos uno solo, el 11 para dar la posibilidad a los de Luke Donal de dejar el marcvador con 11,5 para los europeos y con los deberes para el domingo casi hecho necesitando sólo tres partidos para ganar la Ryder Cup.
Con uno de ventaja llegaron al 17 donde Estados Unidos empató gracias a un birdie de Cantlay. El 18 iba a ser protagonista de nuevo en esta Ryder Cup. Los europeos no cogieron calle en el último par cinco del día mientras que los estadounidenses dieron dos excelentes golpes a calle. La ventaja era en esos momentos para ellos pero dos malos golpes americanos igualaban las cosas alrededor del green. Al final putt kilométrico de Cantlay y punto para Estados Unidos que deja con cinco de ventaja a Europa de cara a los individuales.
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