Luchando por mantener su estatus en el PGA Tour, Ryan Brehm firmó este sábado una vuelta de 68 golpes, cuatro bajo par, bajo unas condiciones complicadas, con lluvia a raudales para lograr una ventaja de tres golpes en el Puerto Rico Open sobre Michael Kim que con -12 es segundo en solitario.
Brehm, con su esposa Chelsey a su lado haciéndole de caddie, está jugando su último torneo en el PGA esta temporada gracias en una exsención médica menor, por lo que necesita ganar o terminar segundo en solitario para conservar su estatus en el circuito.
“Obviamente, si me hubieras dado a elegir y me hubieras ofrecido esta opción y esta situación en la tabla al comienzo de la semana, lo habría cogido sin dudarlo”, dijo Brehm. “Queda mucho golf todavía. Quiero decir, honestamente, todo lo que Chelsey y yo estamos tratando de hacer es un buen swing uno tras otro y seguir adelante. Eso es realmente todo lo que estamos tratando hacer”, dijo el líder.
Brehm, de 35 años, no ha ganado nunca en el PGA Tour y una victoria le cambiaría la vida a este jugador que ahora mismo ocupa el puesto773º del mundo.
“Sé que alguien va a jugar bien, probablemente más de un rival, así que dependo de mí. tengo que salir, hacer mi trabajo y jugar mi juego”, dijo Brehm. “Probablemente no vamos a cambiar mucho estratégicamente", dijo.
El canario Rafa Cabrera Bello, sin tarjeta del PGA esta temporada firmó su segunda vuleta consecutiva de 71 golpes para situarse trigésimo sexto con -1 y buscar este domingo terminar con una buena vuelta que, por lo menos le deje buenas sensaciones en su vuelta a la PGA esta temporada.