Una vuelta de 65 golpes, siete bajo el par del Prestonwood Country Club, ha sido determinante para que Jerry Kelly haya sumado a su palmarés el SAS Championship. Con este torneo Kelly adorna sus vitrinas conel quinto título de su carrera en el Champions Tour, el tercero de la temporada. Aunque comenzaba la jornada desde atrás, el resultado de la primera vuelta, donde firmó nada menos que seis birdies, dejaba claro cuales eran las intenciones del golfista de Madison. De esas seis restas, cinco llegaban consecutivamente.
Sin embargo, la vuelta del ganador no fue la mejor de la jornada. Ese es un honor que se reservaba el australiano David McKenzie que completó el domingo con una cartulina de 63 golpes en la que tras el tropezón del hoyo 1 no dejó sitio para los errores. Cuatro birdies antes del 9 y otros cuatro en la segunda parte le llevaban a cerrar su contabilidad con un eagle en el hoyo 17 que le situaba segundo en solitario.
Menos suerte tuvo Miguel Ángel Jiménez. Al español los problemas le llegaron muy temprano. Tras restar un golpe en el 1 y llegar hasta el 6 a base de pares, en el siguiente le esperaba un triple bogey que pesaría mucho en los siguientes nueve hoyos. A partir del 10 los esfuerzos del malagueño se cenraron en compensar el error a base de birdies. Un bogey más, esta vez en el 12 dejaría en tablas la última jornada de Jiménez.