Tras una semana épica para el golf español en la PGA, Jon Rahm no ha conseguido la victoria ni la tarjeta para esta temporada -todavía-, pero se lleva del Congressional un regalo que le hace especial ilusión: jugar este próximo mes de julio su segundo torneo del Grand Slam consecutivo, el Open Championship en Troon.
Y lo hará con otros tres jugadores que, como él, no tenían plaza asegura pero que han conseguido en el Congressional una de los lugares para el Open tras terminar entre los cuatro primeros, Vijay Singh, Harold Varner y Bill Hurley.
Pero de todos ellos quien más méritos atesora, sin ser chovinistas en absoluto, es el vizcaíno Jon Rahm. Y es que el de Barrika ha entrado en la PGA, el circuito de golf más duro y exigente del mundo, por la puerta grande, rozando la victoria, demostrando su poderío, su madurez y sus ganas de llegar a lo más alto cuanto antes.
Da la sensación, visto lo visto esta semana en el torneo de Tiger Woods, que Rahm no tendrá muchos problemas para conseguir sus objetivos. Esta semana vuelve a jugar en Estados Unidos y como sucedió en el Congressional, saldrá a por todas.
Lo de esta semana no ha sido un accidente, ni fruto del destino o la suerte. Rahm ha sido uno de los mejores y sus 400.200 dólares ganados golpe a golpe y sus 162,50 puntos FedEx no serán los últimos que logre este año en las seis invitaciones que aún le quedan por completar.
Rahm se ha convertido, seguramente sin quererlo, en un soplo de aire fresco para un golf español que lo necesitaba a marchas forzadas. Con Sergio García y junto a Rafa Cabrera Bello pueden ser un trío mortífero en la PGA el año que viene. Va a ser un placer verlos a los tres juntos en el mejor circuito del mundo y ojalá que a ellos se una en 2017 de nuevo Gonzalo Fernández Castaño. Esa si sería una “Armada” de verdad.
Pero para que eso suceda tienen que pasar muchas cosas, entre ellas que Jon siga trabajando, que consiga más y mejores buenos resultados, que gane cuanto antes un torneo -da la sensación de que no tardará mucho- y que con su fuerza arrastre la pasión de este deporte de nuevo en nuestro país.
De Barrika, pasando por Washington y hasta Troon. Allí, jugando el Open Championship veremos este mes de julio a este mocetón que parece no tener límites. Esto no ha hecho más que empezar y sinceramente creo que correrán muchos litros de tinta hablando sobre este nuevo fenómeno del golf mundial.