No está teniendo Tiger Woods un buen día en cuanto a los resultados se refiere pero quizá eso no sea lo más importante en esta semana sino su recuperación y que de nuevo está en los terrenos de juego tras su operación de espalda.
El que fuera número uno del mundo quiere estar al cien por cien en la próxima edición del Open Británico que se jugará en el Royal Liverpool. Un campo donde Tiger ya ganó este mismo torneo en el año 2006.
Tiger sabe que para poder llegar alk tercer Major del año en condiciones debía de probarse y es lo que está haciendo en este torneo en el que no habría jugado si los fondos recaudados no fueran para su fundación.
Con Tiger han vuelto a llegar los espectadores a los campos en masa, se han vuelto a contratar espacios de televisión y las audiencias de los canales que dan en directo el Quickens Loans Invitational empiezan de nuevo a tener cifras de audiencia similares a las que conseguían con Tiger en juego.
Vermos si Tiger pasa el corte este fin de semana, y como se encuentra tras estos primeros dieciocho hoyos en las que las sensaciones físicas no están siendo malas pero las de juego no tan buenas. ç