martes 08 de febrero de 2011, 00:00h
Jugador y caddie deben ser el binomio perfecto. El segundo debe ser como un apéndice del primero y el primero consulta casi todo con el segundo, pero ¿esto es lo que necesitan algunos jugadores?
Alvaro Quirós terminó la relación con su caddie Alastair Mclean justo antes de la Race to Dubai del pasado año y a ese torneo se llevó a un gran amigo, Carlos Espinosa caddie master de Valderrama, pero necesitaba un profesional para la temporada 2011 que comenzaba en breve y encontró a Ruben Yorio, argentino nacido en Buenos Aires y caddie de Angel Cabrera con el que ganó el Master de Augusta del 2009. El bonaerense está siendo su 50% durante la gira del desierto y en palabras del propio Quirós:”Voy a probar y a esperar” . Que pasará cuando termine de jugar en Dubai? Nos quedan unos días para saberlo.
La meta del gaditano es posicionarse en la élite mundial y como los fantasmas le rondan en la cabeza y como además le falta confianza en su propio juego, el gaditano ha estado trabajando durante la pretemporada y sigue haciéndolo, con una psicóloga. Su nuevo caddie, también, trata de sacarle de algunas de sus dudas y en muchas ocasiones se produce una ecatombe en esa cabecita y termina por no rendir. Necesita dar un salto mental, que no mortal, creer en él mismo y no buscar excusas ni culpables en la toma de decisiones cuando estas son malas.
El domingo vimos a un Álvaro cabreado, regaló el torneo de Qatar, se dejó algunos birdies por el camino. Imágenes de TV nos mostraban a un jugador molesto en algunos casos, con decisiones que no eran del todo acertadas, pero cuando llegamos al hoyo 17, par tres, viento en contra….todos tuvimos la certeza, escuchando la retransmisión, que Álvaro se había equivocado en la elección del hierro.
¿Quién toma la decisión de coger un wedge con el viento en contra? ¿Quién decide que en vez de un golpe entero se haga ¾ de golpe?, aparentemente en las imágenes se ve al caddie diciéndole al jugador que se ha equivocado de hierro y de golpe. Se admiten bien las críticas?
Unos días antes, habían tenido una charla previa, donde Álvaro le dijo a Yorio que no le diera muchos datos si no se los preguntaba, que se limitara a darle las distancias y poco más, así él sería el único responsable de su juego, bueno o malo. ¿Un caddie profesional se tiene que quedar en ser un simple porteador?
Mi opinión absolutamente personal, es que en el caso del de Guadiario, sería bueno llevar a alguien que le conozca, que sepa de su estado de ánimo con solo mirarle, que sea capaz de sacar una sonrisa cuando lo único que apetece es tirar los palos, en definitiva, un amigo. Es cierto que para que un caddie conozca a su jugador hace falta tiempo y Quirós y Yorio tienen una relación de muy poco tiempo. ¿Le dará el jugador la oportunidad al argentino de seguir con él? Lo sabremos cuando termine de jugar en Dubai.