La tertulia comenzó reconociendo el deseo y la ilusión de los jugadores por comenzar la nueva temporada. Después de unos días de frío, nieves y lluvias, apetece jugar y eso se nota. Para Iñigo, “hay ansiedad y desde diciembre ya nos están llamando para preguntar por los torneos y las inscripciones”. Precisamente este hecho rebate la tesis de una crisis económica en el sector del golf.
Las ganas de los jugadores hace que los Green Fee sigan floreciendo, pero no es oro todo lo que reluce. Luis Sobrino, que desde Dos Folios y Medios es responsable de la Comunicación de varias empresas, entre las que destaca Aymerich y Cap Cana, considera que de momento la crisis no se percibe desde el punto de vista del número de jugadores, y todavía hay mucha gente que sigue saliendo al Campo o con ganas de salir. En ese sentido, Aramburu, que desde Deporte & Business organiza numerosos torneos de empresas y profesionales, coincide en que “la crisis no se notará tanto en el jugador de a pie sino en las empresas. Muchos Circuitos ya han caído y los patrocinadores abandonan”. Pero los contertulios huyen del pesimismo. “La crisis es oportunidad”, dice Aramburu. “El mercado está ajustando los excesos de estar muy inflado y habrá un reajuste. Por eso hay que reposicionarse y ahí algunos lo pasarán mal”.
Para Sobrino “los campos estaban muy ligados a la construcción y ahora para hacer un campo no vas a tener nada de crédito”. Algunas soluciones llegaron enseguida. “Hay que poner toda la carne en el asador”, dice Aramburu. “Para resistir es necesario mejorar los servicios, atraer al cliente, ser mejor porque en tiempos de crisis la gente se lo piensa más y no le puedes dar cualquier cosa”. Para Iñigo, el hecho de ser mejor pasa por hacer cosas nuevas, con imaginación y trabajo, para lograr mantener los clientes de 2008. En ese sentido mencionó algunas de las novedades que pretende imponer en este 2009 en todos los torneos que organiza.
“Tenemos el Drive más preciso, que ayuda a los no pegadores a llevarse un premio dejando la bola lo más centrada posible en la calle, o la publicidad en el Hoyo, el leaderboard o el servicio de fotografía casi instantáneo”. Como novedad, este año en la European Ladies Cup hay un Circuito Amateur en el que están en juego plazas para el Pro-am. El objetivo es hacerlo en toda España y quizá en Europa. Por su parte, Sobrino insiste en que “hay que poner alicientes para salir de la situación”. Uno de ellos son las tarjetas de Aymerich que ahora serán también corporativas dando un valor añadido a las empresas. De esta manera se logra un incentivo para los empleados y se da a conocer el producto. También se piensa en organizar viajes y en acudir a diferentes colectivos que puedan beneficiarse de las ventajas que ofrece el producto.
Precisamente el capítulo de viajes de golf se trató en la tertulia. Para Aramburu los viajes seguirán haciéndose. “Los grandes viajes siguen funcionando y los Resorts tienen que ajustarse y bajar precios. Los clubes que no se muevan sufrirán”. Del mismo modo, los torneos de golf como producto de másrketing sigue siendo válido según los contertulios. Luis Sobrino considera que “dan buena imagen y cercanía y te acerca mucho más al cliente”. Por su parte, Aramburu con los torneos “mimas al jugador, que es el protagonista, y está relajado para recibir tu mensaje. No es un sujeto pasivo”.
Ideas nuevas, trabajo e imaginación son las soluciones a la crisis en un momento en el que todos coinciden en que es necesario reajustar el mercado para sobrevivir y a la larga sacar provecho de la situación.