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Volverán a verse la próxima semana

Donald Trump y Eugenio López Chacarra jugaron juntos en Washington

Donald Trump y Eugenio López Chacarra jugaron juntos en Washington

Por Guillermo Salmerón
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lunes 21 de julio de 2025, 18:47h

Este pasado domingo, el Trump National Golf Club de Washington se convirtió en el escenario de una partida muy especial entre el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y el golfista profesional madrileño Eugenio López Chacarra.

En una jornada que combinó deporte y afinidad personal, ambos compartieron 18 hoyos en una atmósfera de complicidad y admiración mutua. Trump, apasionado del golf desde hace décadas, ha logrado convertir este deporte en uno de los pilares de su identidad pública y privada. Propietario de numerosos clubes alrededor del mundo, entre ellos el icónico Turnberry en Escocia, el mandatario ha utilizado el golf como herramienta para construir relaciones políticas y fortalecer su perfil internacional. Su estilo competitivo y directo se refleja también en la forma en que vive cada partida como una batalla estratégica sobre el green.

Eugenio López Chacarra, por su parte, vive un momento excepcional en su carrera. Tras su histórico triunfo en el Hero Indian Open del DP World Tour, se ha consolidado como uno de los referentes del golf español. Su meta esta temporada es clara: cerrar el año dentro del Top-10 del Tour Europeo, lo que le permitiría abrir las puertas del codiciado PGA Tour en 2026. Su talento, disciplina y madurez dentro y fuera del campo han captado la atención de patrocinadores y figuras del deporte, pero la alianza que ha surgido con Trump Golf desde este lunes -lucirá su logotipo en su bolsa de golf- podría significar un salto cualitativo en su proyección internacional. El respaldo del presidente no solo aporta recursos, sino también visibilidad en un entorno donde el golf y el poder se entrelazan con naturalidad.

Tras la partida, ambos compartieron almuerzo y ya han acordado jugar de nuevo la próxima semana, reforzando así una relación que parece ir mucho más allá del simple patrocinio. En este encuentro se confirma cómo el golf puede servir como puente entre mundos tan dispares como la política y el deporte de élite. Trump reafirma su pasión por el juego, mientras Chacarra sigue construyendo su legado, dispuesto a dejar huella en los principales escenarios del golf mundial.

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