La noticia ya está confirmada y Tiger Woods junto a su hijo Charlie, de 12, años volverán a jugar juntos un año después de que debutaran en esta competición y nueve meses después del trágico accidente que el norteamericano tuvo en su coche y que a punto estuvo de costarle la vida sufriendo graves lesiones en su pierna derecha.
El PNC Championship empareja a un jugador profesional con un miembro de su familia. Un torneo que se llevará a cabo del 17 al 19 de diciembre en el Ritz-Carlton Golf Club en Orlando, Florida.
Una noticia que parecía que iba a llegar antes o después tras aparecer Tiger Woods en el Hero World Challenge de la semana pasada, haciendo una entrevista previa al torneo, una rueda de prensa y mostrando unas imágenes dando golpes y entrenando en el campo de prácticas del Albany Golf Club.
“Creo que es realista pensar en volver a jugar otra vez en el PGA TOUR pero no jugar como única cosa en la vida, como hacía antes del accidente", dijo. "Jugaré algunos eventos al año. Creo que así es como voy a tener que jugar a partir de ahora. Es una realidad lamentable, pero es mi realidad. Y lo entiendo y lo acepto", aseguró.
Woods también dijo en su conferencia de prensa que no estaba seguro de cuándo regresaría al TOUR. Sin embargo comentó, que "Jugaré una ronda aquí o allá, un pequeño golpe y unas risas. Puedo hacer algo así". Muchos lo tomaron como una pista para la confirmación de su participación en el PNC y que esta estaba en sus planes.
Tiger y Charlie hicieron su debut en el torneo en 2020, la última vez que Woods jugó golf competitivo, y terminaron séptimos. Ahora volverán a jugar juntos y ambos lo harán enta la misrada de millones de personas que, además de ver las evoluciones del pequeño Woods, querrán ver como está el ex número uno del mundo y sus sensaciones de cara a una posible vuelta al golf de máximo nivel.