El golf coreano está de moda y no solo en la LPGA donde domina ampliamente. Tambien en el Masters de Augusta y, tras una primera jornada marcada por el viento y la lluvia, sobre todo a primera hora del día y que hizo que los greenes se ralentizaran mucho, un coreano -mejor rookie del año en 2019 en el PGA Tour- se ha colocado como líder del torneo en solitario con cinco bajo par y la sensación de estar haciendo las cosas muy bien.
Sungjae Im firmó unos nueve primeros hoyos perfectos con 4 birdies y el mejor comoenzo del torneo con aciertos en el 1, 2, 3 y siete para situarse con 32 golpes en lo más alto de la tabla con cuatro bajo par y nueve hoyos por delante para seguir mejorando.
Pero en los nueve segundos Agusta dictó su ley y las cosas se complicaron para Im que empezó la segunda parte de la vuelta con dos errores al 10 y al 11 que le bajaban al suelo de los mortales. Sin embargo, un espectacular eagle en el 13 y un birdie más en el 15 le devolvían a esos -5 que, finalmente, le dejaron como líder en solitario con un golpe de ventaja sobre el australiano Cameron Smith que con -4 ha vuelto a demostrar que se puede contar con él para ganar un gran torneo como el Masters.
Empatados con -3 han terminado cuatro jugadores que tienen que confirmar su buen momento este viernes, Danny Willet -ganado en 2016- Joaquín Niemann, Scottie Scheffler y un Dustin Johnson que quere volver a ganar en Augusta. Kokrak, Conners y Cantlay acabaron con -2 y con -1, cerrando el grupo de jugadores que lograron terminar bajo el par del campo hasta ocho jugadores entre los que se encuentran hombres como Tony Finau, Webb Simpson, Harold Varner III o el mismísimo Tiger Woods.
El estadounidense sorprendió a todos, una vez más, jugando a un grandísimo nivel, terminando con uno abajo y dejando claro que Tiger Woods es inagotable y casi un dios del Olimpo en esto del golf. Tras 14 meses de inactividad tras su terrible accidente en Los Ángeles y 408 días sin competir en torneos de máximo nivel, el californiano dejó claro que viene a por todas, no a pasar el corte, sino a luchar por la victoria.
Su menos uno de este jueves es la prueba palpable de que el trabajo, la superación y la fe mueven montañas y que a pesar de haber estado varios meses con la posibilidad real de que le amputaran la pierna derecha, Woods luchó contra todo para volver, una vez más, a cumplir su sueño y estar, como estuvo hace 25 años cuando ganó su primer Masters de Augusta, en el ojo del huracán de este deporte.
Quienes no brillaron demasiado en esta primera jornada del Masters de Augusta han sido los tres españoles participantes en el torneo. Olazábal, que fue el primero en salir, terminó con +5 después de una jornada muy irregular donde su juego no brilló para nada. "Bastante que estoy ahí", dijo el guipuzcoano. Sergio García terminó al par, a cinco de la cabeza, mientras que Jon Rahm, número 2 del mundo y principal favorito a la victoria, terminó con +2 y con la obligación de hacer hoy una buena vuelta si no quieretener problemas.
La solución a toda la primera parte del Masters este viernes, con más viento y un campo muy complicado para todos.