La cuarta y última vuelta para Jon Rahm tampoco fue buena. El par del campo, igual que ayer no le sirvió para mejorar demasiadas posiciones en un torneo en el que tras entregar su tarjeta terminó cuadragésimo séptimo. metido entre los cincuenta primeros pero, seguramente, muy lejos de sus objetivos y de unas previsiones que le situaban como el cuarto favorito a la victoria empatado en las casas de apuesta con el mismísimo ganador del Masters, el castellonense Sergio García.
Hoy Rahm firmó una tarjeta con 70 impactos con sus nueve primeros hoyos saldados con dos bogeys en el 1 y el 6 que luego mejoraron algo con tres birdies al 1, al 14 y al 16 y bogey más en el 12 que le dejaron con esos +3 con los que empezó el día.
Un Open muy alejado de sus objeivos, sobre todo después de la excepcional semana que vivió en el Open de Irlanda cuando consiguió ganar el torneo con 24 bajo par.
"Hace falta mucha práctica en los links. Seguro que seguirá pasando, pero a ver si aprendo de ello", dijo el jugadore español que ahora se tomará unos días de descanso antes de retomar su actividad habitual en el PGA Tour donde le esperan varias semanas seguidas de actividad.