Esta semana el golf va a vivir desde el jueves cuatro días de auténtica emoción por muchas razones. No sólo por la "espanta" de Tiger Woods sino por la vuelta de José María Olazábal, que de nuevo se “vestirá de corto”, sino también por el estreno de Jon Rahm con la tarjeta de la PGA en su poder y la vuelta, tras un año en el “infierno”, de Gonzalo Fernández Castaño al mejor circuito del mundo.
Es verdad que el retorno de Tiger Woods al primer plano de la actualidad llegaba lleno de emoción y buenas sensaciones al mundo de los 18 hoyos. Sus problemas físicos, sobre todo de espalda, hicieron que la mayoría de los aficionados al golf pensáramos que el ex número uno del mundo -ahora situado cerca del 800 del WR- no volvería a pelear en la PGA. Y parecía que su vuelta se produciría esta semana en el inicio del circuito norteamericano de la 16/17. Sin embargo, las buenas sensaciones y la ilusión del mundo del golf se venía abajo cuando esta noche, a través de su web, Woods confirmaba que no empezaba la temporada y que tampoco jugaría en Turquía.
Con la ausencia de Tiger el interés para nuestros aficionados se centra ahora en dos jugadores españoles que han llegado a la PGA en esta nueva temporada por caminos bien diferentes. Por una parte el madrileño Gonzalo Fernández Castaño que retorna al mejor circuito mundial tras una temporada muy complicada en la que ha conseguido la tarjeta en el último capítulo del año, en unas finales en las que ha jugado su mejor golf demostrando que tiene sitio entre los mejores siempre que sus problemas físicos y su espalda le dejen jugar como él sabe. El madrileño ha vuelto para quedarse y esta primera cita de la temporada quiere demostrar que lo del “infierno” está olvidado y superado.
Como él, llega también a la PGA el vasco Jon Rahm que tras unas fugaces actuaciones a finales de la temporada pasada logró su tarjeta y un millón de dólares en apenas cuatro torneos, asegurándose su pasaporte para este año que ojalá sea muy grande para él y para el golf español.
Otro vasco, José María Olazábal, volverá a jugar un torneo oficial -el British Masters del European Tour- 18 meses después de su última aparición. Vuelve tras recuperarse de una nueva crisis de su poliartritis reumática con la ilusión de un chaval y con ganas de seguir disfrutando de su deporte y su vida. Cuatro historias bien diferentes pero con un denominador común el golf y la ilusión por una nueva etapa que los cuatro comenzarán este jueves.