No ha podido empezar peor esta Ryder Cup para el equipo europeo capitaneado por Darren Clarke. El equipo estadounidense se ha colocado con cuatro arriba después de una jornada de Foursomes en la que los estadounidenses han dado un golpe de mano brutal y han dejado el marcador tras la jornada de mañana por 4 a 0.
Europa no se veía contra las cuerdas en la primera jornada desde la edición de 1975 en Laurel Valley (EE UU), que acabó con una abultada derrota de 21 a 11 a manos de un equipo estadounidense capitaneado por el difunto Arnold Palmer, homenajeado esta semana.
Desde 1927, año en el que empezó a disputarse la Ryder Cup, el equipo norteamericano sólo se había puesto con cuatro arriba tras los primeros cuatro partidos en cuatro ocasiones. Para la jornada de fourballs de la tarde, el capitán del equipo europeo Darren Clarke ha decidido sentar en el banquillo al veterano inglés Lee Westwood y sustituirlo por su compatriota Danny Willett, ganador del Masters de este año.
Pero el drama comenzó muy pronto para los europeos. La pareja estadounidense formada por Spieth y Reed fueron los primeros en derrotar con una ventaja de tres hoyos y dos hoyos por jugar (3-2) al dúo compuesto por Stenson y Rose. Poco después, Dustin Johnson y Matt Kuchar sentenciaban un partido (5-4) en el que sacaron ventaja desde los primeros hoyos a Lee Westwood y el principiante Thomas Pieters.
Sergio García y Martin Kaymer fueron la tercera pareja derrotada (4-2) por Jimmy Walker y Zach Johnson, después de perder una ventaja de un hoyo en la recta final.
McIlroy y el inglés Andy Sullivan tampoco fueron capaces de contener la embestida estadounidense y perdieron por un hoyo contra la pareja formada por el veterano Phil Mickelson y el joven Rickie Fowler.